Reynés salda la junta de accionistas de Naturgy con detalles menores sobre la escisión
La junta de accionistas de Naturgy se cierra sin detalles sobre el plan para dividir la empresa en dos. El mercado esperaba saber más sobre la estrategia, pero Reynés solo entrega un “calendario abierto”
Naturgy realizó un ejercicio de seducción frente a sus accionistas con el que trató de convencerles sobre las ventajas de su proyecto de escisión en dos compañías, sin entrar en detalles de cómo lo llevará a cabo.
La compañía energética presidida por Francisco Reynés celebró el martes la junta general de accionistas de 2022. El mercado la había anotado en el calendario como un posible punto de referencia para tener más datos sobre los términos clave de la transacción.
Reynés, sin embargo, se limitó a asegurar que el análisis realizado por la compañía hasta el momento de los temas y dinámicas clave en el sector energético "confirman la idoneidad" de este desmembramiento de Naturgy en dos empresas diferenciadas.
También defendió que el calendario de decisiones que vaya tomando al respecto su consejo de administración será flexible.
"Tenemos un calendario que se tendrá que adaptar en función de las incertidumbres", aseguró Reynés. También apuntó que la escisión "dinamiza el futuro de ambos grupos, refuerza su atractivo, y es positivo para los accionistas y para los empleados".
Naturgy dibuja un contexto sectorial de cambio obligatorio
Naturgy dibujó ante sus accionistas el contexto de un sector energético que se enfrenta a un momento de profunda transformación, obligándoles a replantear la estructura de su compañía en dos partes.
Dos nuevas empresas que el presidente de la energética indicó que "serán más competitivas gracias a una mejor dotación de los recursos donde toca".
El sector energético, afirmó Reynés, se enfrenta a un "superciclo inversor" en el que todo el proceso de adaptación a las energías renovables "requiere y requerirá de importantes inversiones".
El presidente de la cotizada del IBEX 35 indicaba, además, que este proceso tendrá que hacerse en un marco empresarial en el que "predomina la simplificación y el reenfoque de los modelos de negocio". Un ámbito de actuación que está causando que tanto en España como en países vecinos se esté pivotando hacia "modelos de gestión con el objetivo de ser más sencillos, más simples, más entendibles y, por tanto, más eficientes".
Otro imperativo destacado en la junta de Naturgy fue la creciente importancia de unos aspectos de sostenibilidad que exigen una alineación con la taxonomía de la Unión Europea, y que "van a presidir muchas de las decisiones que se van a tomar en el futuro".
La respuesta de Naturgy a este marco de actuación
Ante este escenario esbozado por la compañía, Reynés defendió la necesidad de dar respuesta a todos estos retos con una escisión que materializará una estructura interna en la que ya se divide el funcionamiento de sus negocios.
Actualmente, explicó Reynés, Naturgy ya tiene dos tipos de negocio, el de redes y el de mercados, en los que "las sinergias entre ambos son limitadísimas". El hecho de separarlos completamente, por tanto, generaría "unos costes operativos con un incremento nada significativo".
El presidente de la compañía salía así al paso de "informes publicados en los últimos días" que citan los grandes sobrecostes de la separación y la gestión de ambos negocios, y que el dirigente quiso desmentir.
"Los negocios ya trabajan de forma autónoma y esos costes serían despreciables", señaló Reynés.
A la vez que desdeñaba este incremento de los costes, el dirigente afirmó que la escisión de Naturgy aumentaría la capacidad competitiva de las nuevas empresas, despojándolas de una estructura más compleja que en estos momentos disminuye sus opciones "al no poder asignar los costes de capital que necesita cada uno de los negocios".
Reynés justificó así el desmembramiento de la compañía, bajo la promesa de que este proceso se traducirá en la creación de dos empresas con una organización ágil y flexible, que estarán "enfocadas en las competencias en donde son claramente diferenciales".
Esta división, concluyó Reynés, "dinamiza el futuro de ambos grupos, refuerza su atractivo y es positivo para los accionistas y para los empleados".
La distribución accionarial de ambas compañías
El espacio de la junta general de accionistas de Naturgy dedicado a dibujar esta división a los inversores terminó con Reynés insistiendo en que el planteamiento "para nada perjudica a ninguno de los accionistas".
A ojos de Reynés, de hecho, este desmembramiento proporcionará a los accionistas la posibilidad de beneficiarse de las ventajas de ambos proyectos.
La división ofrecida por Naturgy, por ende, deja como resultado un control accionarial que se mantiene equitativo en ambas compañías, como puede apreciarse en la siguiente imagen.
De esta manera, Naturgy compartió con sus accionistas los motivos que le llevaron a decidir separar sus negocios en dos compañías, y las razones por las que cree que estos saldrán beneficiados en un futuro inmediato.
Lo hizo, sin embargo, sin ofrecer más detalles sobre cómo distribuirá su deuda entre ambas empresas, el reparto de dividendos que asignará a cada una, o quién dirigirá cada uno de estos spin offs.
El mercado, por tanto, seguirá la espera para conocer más detalles de esta operación y cómo puede afectar al futuro de la compañía como conjunto.
