Pharmamar necesita un rebote de doble dígito para esquivar el precipicio

Pharmamar sigue haciendo equilibrios en el filo de los 60 euros. Si pierde esta zona, el margen de caída es del 20 por ciento

La cotización de Pharmamar consiguió estabilizarse en el filo de los 60 euros, pero sigue muy cerca de terrenos peligrosos. La biofarmacéutica pierde un 17 por ciento en el año y es el tercer peor valor del IBEX 35.  

Desde los máximos que alcanzó en febrero en los 119 euros, la cotización de Pharmamar corrige el 47 por ciento, mientras el número de brokers descontentos con la farmacéutica no para crecer.  

La trayectoria bursátil del grupo gallego ha ido en picado, lo mismo que las valoraciones. A principios de año, el consenso de expertos de finanzas.com calculaba un precio objetivo para la compañía de 123 euros, pero este viernes no van más allá de los 91 euros.  

Los resultados hasta septiembre siguieron impactando al valor y se comieron las proyecciones de beneficio por acción. Hasta tal punto llegaron los nervios, que la empresa tuvo que mandar un comunicado a la CNMV donde mostraba su desconcierto por el castigo bursátil.   

Más debilidad en Pharmamar 

Pese al castigo encajado y los esfuerzos de la compañía por frenar la sangría, Pharmamar siguió de penitencia por el parqué.  

“El valor ha visto debilitado el aspecto técnico con la pérdida reciente de los 66,5 euros, nivel que estuvo actuando como soporte relevante en varias ocasiones desde junio de 2020, y cuya perforación aceleró las caídas a principios de noviembre”, dijo José Luis Herrera, analista en Banco de Inversión Global.  

Ahora, la cotización se ha estabilizado en los 60,5 euros, zona que ejerce de soporte más relevante para la cotización.  

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De perder esta referencia, el objetivo de caída hasta la siguiente zona de soporte estaría en los 50 euros, que son los mínimos relativos de la acción en abril de 2020.  

El margen de caída hasta este soporte es de un 20 por ciento adicional sobre los actuales niveles, lo que refleja la dimensión del precipicio al que se está asomando Pharmamar, dijeron las fuentes consultadas.

Opciones de rebote sostenible 

Por arriba, la situación bursátil de Pharmamar también está muy claro. Según explicó el jefe de análisis de finanzas.com, Josep Codina, la clave para que se pueda pensar en un rebote sostenible pasa por que la cotización recupere los 70 euros.  

Para llegar a esta zona de seguridad, la biofarmacéutica necesita un rebote del 10 por ciento, un avance de doble dígito que no será fácil de conseguir.  

Y es que antes tendrá que lidiar con el antiguo soporte de los 66,5 euros, ahora convertido en “resistencia de calado”, dijo Herrera.  

Pero si pudiera superar esta zona, el rally podría extenderse hasta la zona de los 75-80 euros, según calculó Herrera.  

Difícil salir del atasco sin noticias relevantes 

Las fuentes consultadas explicaron que, en todo caso, Pharmamar necesitaría que el flujo de noticias se vuelva a su favor. El Aplidin contra el coronavirus ha sido el motor de los avances, pero el éxito de la pastilla de Pfizer ha puesto en duda el recorrido de esta medicina.  

No obstante, Codina no lo da todo por perdido con este medicamento. “Si tiene éxito en este tratamiento también puede aportar al control de la enfermedad y se puede beneficiar", afirmó Codina, en clara referencia a lo que ha sucedido con las vacunas, que no solo una se ha impuesto, sino que conviven varias en el mercado”, explicó el experto de finanzas.com.  

A esta carrera por un medicamento contra el Covid-19 se sumó la farmacéutica Merck, que ha logrado un gran apoyo del mercado.  

Retraso para llegar al mercado

El problema de Pharmamar es que todos estos rivales ya están a punto de llegar al mercado con sus medicinas, pero los ensayos con Aplidin van con más retraso, según adelantó finanzas.com.  

La cotización ha estado estrechamente ligada a su apuesta contra el coronavirus y las caídas llegaron conforme se conocían los retrasos en la fase tres del ensayo.

De hecho, os títulos de Pharmamar cotizan algo por encima de los 60 euros, precios en los que se movía cuando Aplidin comenzó a ser una opción contra el coronavirus

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