Repsol deja atrás lo peor y apunta a máximos prepandemia
Repsol saca partido a la subida del petróleo y apunta con su rebote a los niveles previos a la pandemia
Las acciones de Repsol lograron mantener la cota de los 11 euros en un arranque de año que se tradujo para la petrolera en alzas del 7 por ciento. Con esta inercia alcista, el ataque a los niveles previos a la pandemia está a la vuelta de la esquina.
Cuando estalló la pandemia en marzo de 2020, Repsol cotizaba en el entorno de los 12,7 euros, que es justo el precio objetivo que descuenta el consenso de analistas de finanzas.com. Hasta esta zona hay un potencial de subida de casi el 14 por ciento.
Buena parte de esta subida vino impulsada por la fulgurante recuperación del petróleo Brent, que se revaloriza más del 22 por ciento desde los mínimos de diciembre y cotiza en los 85 dólares por barril.
La petrolera lo pasó mal a finales de noviembre, cuando la irrupción de la variante ómicron provocó un temblor en el mercado que mandó sus títulos hasta los 9,88 euros. Desde estos niveles, la recuperación ha sido tan vertical como contundente.
Repsol deja atrás lo peor
Es cierto que algunos inversores bajistas han incrementado la presión sobre Repsol, pero la sensación entre los analistas es que la tormenta ya es historia.
“Los elevados precios de los hidrocarburos, la recuperación de la demanda de combustibles y del margen de refino sugieren que lo peor puede haber pasado para Repsol”, dijeron a finanzas.com los analistas de Bloomberg Intelligence.
Las restricciones de viaje y los cierres afectaron el margen de refino en el primer semestre del año pasado, pero “la expansión posterior y los controles de costos de la compañía deberían ayudar a la generación de ebitda de todo el año”, apuntaron estos expertos.
Además de la subida del petróleo y las mejores proyecciones del negocio, el atractivo dividendo que descuenta Repsol es otro de los factores que está teniendo en cuenta el mercado.
La compañía tiene una rentabilidad por dividendo estimada en 2022 del 5,6 por ciento, según el consenso de expertos de finanzas.com.
Este porcentaje solo está por debajo en el sector europeo de Galp (7,11 por ciento) y de Eni (6,1 por ciento), pero supera a gigantes como BP (5,13 por ciento) o Royal Dutch Shell (4,2 por ciento).
El petróleo, en máximos de ocho años
Con todo, Repsol se vio obligada a recortar su dividendo un 40 por ciento en el año de la pandemia, una decisión que “tenía sentido” tras la caída de los precios del petróleo, explicaron en Bloomberg Intelligence.
Pero con la recuperación del crudo y la generación de caja, el incremento del dividendo era el paso natural, junto con la recompra de acciones.
Sin ir más lejos, en Renta 4 Banco esperan que este año Repsol genere un flujo de caja de doble dígito y calculan una rentabilidad por dividendo del 6 por ciento.
La recuperación del petróleo es uno de los grandes catalizadores que sostienen las proyecciones del mercado. Este lunes, el barril de crudo Brent cotizaba por encima de los 85 dólares y marcaba máximos de 2014.
La menor severidad de la variante ómicron de coronavirus y la decisión de la OPEP de aumentar la oferta en 400.000 barriles, que era lo esperado, dieron alas al crudo.
“Existe la creencia de que la demanda seguirá superando a la oferta”, dijo Tamas Varga, analista del bróker PVM Oil Associates.
Repsol, en busca de los 12 euros
Aunque la cotización de Repsol se está tomando un respiro este lunes, los 12,7 euros que vaticina el consenso de analistas fundamentales suponen dejar atrás los niveles previos a la pandemia.
Antes, la petrolera tendrá que superar a muy corto plazo la resistencia de los 11,35 euros y más adelante Josep Codina marca en su análisis técnico diario sobre Repsol una resistencia en los 11,488 euros.
Si la tendencia alcista sigue su curso y la petrolera puede con estos escollos, los expertos consultados no ven ya muchos obstáculos para el ataque a la zona de números redondeos en los 12 euros.
