S&P confía en la hoja de ruta de Cellnex tras la salida de su CEO
Cellnex cuenta con la confianza de S&P para continuar su senda de reducción de deuda y lograr la mejora de su rating, a pesar de las sacudidas recibidas por la empresa en las últimas semanas
Mientras Cellnex mantenga el compromiso que expresó en noviembre de aparcar las compras agresivas y centrarse en rebajar su deuda, S&P mantendrá sin cambios su perspectiva optimista respecto a las posibilidades de subir el rating de la compañía, independientemente de la salida anunciada de Tobías Martínez.
"Es un cambio en la empresa, pero no es un cambio significativo para que veamos de manera diferente la calificación", explicaron los analistas de la agencia en una entrevista con finanzas.com.
"Tobías ha hecho un buen trabajo, pero su mandato tenía una fecha límite y la empresa tiene ahora un enfoque diferente. Por lo tanto, necesitan un CEO que esté allí con una visión más a largo plazo", añadieron.
Y es que, si bien la hoja de ruta de Cellnex para este 2023 se vio sacudida en enero por la incertidumbre respecto a quién liderará la empresa a partir de junio y por la especulación acerca de una posible por parte de American Tower, el objetivo de la compañía sigue estando claro: lograr una mejora de ratings por parte de S&P que le abra la puerta a mejores condiciones financieras en un contexto de tipos de intereses elevados.
Un objetivo que S&P ve alcanzable entre finales de 2023 y 2024, una vez la empresa reduzca su ratio de deuda/ebitda por debajo de las 7 veces.
Cellnex, que presentará sus resultados del 2022 el próximo 1 de marzo, cerró los 9 primeros meses de 2022 con este ratio situado en las 8,17 veces, cuando un año antes se situaba en las 11,37 veces, de acuerdo a los datos proporcionados por Bloomberg.
Las previsiones de Cellnex son favorables a la mejora de su rating
A ojos de Standard & Poor's, Cellnex tiene mucho a favor de esta futura mejora en su rating porque forma parte de un sector "que ofrece buena visibilidad de sus ingresos y flujos de caja, porque tienen contratos a muy largo plazo con operadores de telecomunicaciones, que además ofrecen condiciones favorables a los operadores de torres".
Dentro de este contexto, asimismo, los analistas de la agencia de calificación detallaron que Cellnex, particularmente, tiene una buena capacidad para trasvasar el aumento de costes, como el de la energía, directamente a los operadores, por lo que se mueve en un entorno de fortaleza para sus perspectivas.
Bajo esta premisa, y teniendo en cuenta que el escenario base de S&P no contempla que la cotizada del IBEX 35 logre su mejora de rating antes de noviembre de 2023, los expertos sí reiteraron su opinión de que la compañía mantendrá su sólido rendimiento operativo en los próximos años.
Una opinión que, de acuerdo a su informe del pasado mes de noviembre, se traduciría en un aumento del ebitda ajustado hasta los 3.100 o 3.300 millones de euros en 2024, frente a los 2.700 o 2.800 millones de euros previstos para 2022.
Cellnex, por tanto, parece contar con viento a favor para que su crecimiento orgánico impulse un incremento considerable en sus cuentas, que llegaría acompañado de una mejora de rating, y la consecuente posibilidad de mejorar sus opciones de financiación.
Fitch, cabe recordar, ya reafirmó el rating de la torrera el pasado mes de enero, manteniéndola en una escala BBB- de grado de inversión que S&P todavía no le concede, pero que podría revisar al alza si todo continúa respecto a sus previsiones.
Los rumores de opa no interfieren en la valoración de S&P
Los expertos de S&P, por último, explicaron a finanzas.com que las sirenas de opa que llevan sonando en el entorno de Cellnex durante las últimas semanas son en estos momentos, a su entender, solo rumores que no les permiten medir realmente cuál sería el impacto sobre la compañía.
Si se diera alguna operación, no obstante, la agencia tendría que analizar múltiples factores, como la estructura del acuerdo, o cuánta deuda recaudan las entidades compradoras para llevarla a cabo, para emitir un veredicto.
Sin entrar a valorar si la operación es factible o no, los expertos de S&P apuntaron que si existieran problemas de competencia en países europeos a raíz de esta posible opa, tendrían que solventarse mediante ventas de activos que aseguraran que la cuota de mercado no fuera excesiva.
En este sentido, desde Bloomberg Intelligence señalaron durante el mes de enero que, en su opinión, "si American Tower adquiere Cellnex también intentará mantener el grado de inversión", como hizo tras la adquisición de Coresite por cerca de 10.100 millones de dólares.
Un objetivo que tildaron de "financieramente posible", pero que apuntaron que requeriría o bien una ampliación de capital por parte de American Tower que sería "mayor que la de Coresite", o una inversión de capital considerable por parte de su presunto socio, Brookfield.
Anteriormente, la firma de análisis también señaló que American Tower "podría gastar 33.000 millones en Cellnex", cuando el valor de la compañía española, incluyendo su deuda, rondaría los 54.000 millones de euros.