Telefónica se las arregla para atar toda La Liga por 190M€ menos al año

Telefónica refrendó el martes su apuesta por el fútbol como elemento troncal en el futuro de Movistar+. Confirmó un acuerdo con DAZN que le permitirá emitir la liga de fútbol profesional español, en su totalidad, durante las cinco próximas temporadas.

La compañía dirigida por José María Álvarez-Pallete ratificaba así las especulaciones del mercado, que apuntaban a este acuerdo hace más de un mes, y emitía un mensaje inequívoco.

A pesar de las voces que abogaban por un cambio radical en la gestión de la división de contenidos audiovisuales de Telefónica, y que llegaron a especular incluso con la entrada de un socio industrial para ayudar a optimizar sus productos, el devenir de Movistar+ pasará indiscutiblemente por una fórmula enraizada en el núcleo de la empresa, ser la casa de La Liga.

El problema para Telefónica, cotizada del IBEX 35, no obstante, es que con este acuerdo no previene la aparición de otros competidores en este campo en un futuro cercano.

Telefónica corrige el reparto de La Liga

La Liga anunció en diciembre la adjudicación de sus derechos audiovisuales por 4.950 millones de euros bajo un formato en el que Movistar retransmitiría cinco partidos por jornada y DAZN, otros cinco.

Ya en este reparto, Telefónica se aseguró una posición dominante sobre la liga española al cerrar en exclusiva tres jornadas completas del campeonato liguero, pero desde el primer momento señaló que su intención pasaba por ofrecer a sus clientes el campeonato liguero al completo.

Con la firma del acuerdo anunciado el martes, Telefónica consigue este objetivo, y tomando como referencia las cifras del acuerdo recogidas por Banco Sabadell en su análisis de la operación, lo hace a mejor precio del pagado en anteriores repartos de derechos.

De acuerdo al análisis de la entidad financiera, si el acuerdo entre DAZN y Telefónica se firmó por 1.400 millones de euros, el coste total por temporada para la empresa del IBEX 35 ascendería a 800 millones de euros, una vez sumados los 520 millones de euros por temporada ya establecidos durante el primer reparto televisivo.

Esta cifra de 800 millones, por tanto, sería significativamente inferior a la cifra de 990 millones por temporada que se obtendría al dividir los 4.950 millones de la adjudicación conjunta a DAZN y Telefónica realizada durante diciembre, y que la empresa de telecomunicaciones habría tenido que pagar en solitario si hubiera querido eliminar la competencia y satisfacer las expectativas de la institución deportiva.

Una noticia sin gran impacto en el mercado

Desde Bankinter calificaban la noticia del acuerdo como positiva, al considerar que la oferta de este contenido futbolístico en exclusiva, al que suma la UEFA Champions League y la Europa League, "es clave para el mantenimiento del liderazgo de Telefónica en España".

"El mantenimiento de la exclusividad de este contenido evita la pérdida de clientes y la reducción del consumo medio por cliente (ARPU) desde unos 90 euros al mes hacia la media de cerca de 60 euros al mes, que no se hubiera compensado por el ahorro en la adquisición de los derechos", explicaban desde el banco.

La entidad financiera apuntaba, sin embargo, que su escenario central de análisis sobre la empresa ya contemplaba la retención de un paquete de derechos lo suficientemente atractivo para evitar una pérdida sustancial de cuota de mercado por este motivo.

Por tanto, mantenían sin cambios su recomendación neutral sobre la compañía, que llegaba acompañada de un precio objetivo de 4,5 euros.

Telefónica cotizaba con subidas del 1,5 por ciento durante la mañana del martes, elevando el precio de sus acciones hasta los 4,38 euros, una cifra muy cercana a los máximos de 4,42 logrados durante el año 2022, y también al precio objetivo del consenso, establecido en 4,72 euros.

Tras la publicación del acuerdo, Bestinver, GVC Gaesco, Banco Santander y JP Morgan hicieron una actualización sin cambios en sus opiniones sobre la empresa del IBEX 35, que en el caso de las tres primeras pasaba por consejos de compra sobre sus títulos, mientras que la entidad norteamericana mantenía su recomendación de venta.

El problema de una futura competencia

El acuerdo firmado entre Telefónica y DAZN asegura que la primera pueda retransmitir tanto sus propios partidos como los controlados por DAZN, mientras que DAZN no podrá acceder a los partidos de Telefónica.

Un cliente de Telefónica, por tanto, podrá ver las jornadas completas de La Liga a través de cualquier plataforma de Movistar+, mientras que los usuarios de DAZN tendrán que conformarse con los cinco que emita la empresa de OTT cada fin de semana. DAZN, no obstante, cuenta con dos puntos a su favor en este acuerdo.

El primero es que, al igual que ha hecho con Telefónica, podrá ahora ofrecer estos cinco partidos que controla a otros teleoperadores, como por ejemplo Orange, o a Amazon Prime que ya mostró su interés por irrumpir en el fútbol español.

El segundo es que, de acuerdo con fuentes de Telefónica consultadas por finanzas.com, DAZN podría acceder en el futuro de forma mayorista a sus derechos para ofrecerlos a sus clientes, aunque en ese caso no podría revender los partidos de Telefónica a terceros.

Y estos supuestos, aunque lejanos, animan un mercado que Telefónica dominaba de forma abrumadora durante los últimos años.

El rechazo a otras vías de reanimación para Movistar+

La noticia de la apuesta definitiva de Telefónica por el fútbol llegaba, asimismo, un día después de que fuentes consultadas por Bloomberg aseguraran que la empresa dirigida por Álvarez-Pallete rechazó una oferta de compra por parte de Vivendi.

De acuerdo con la información publicada por el medio estadounidense, el grupo de medios de comunicación francés se interesó por la posibilidad de adquirir la emisora, pero se topó con la negativa de Telefónica, a pesar de que está llevando a cabo una revisión estratégica de su división de contenidos audiovisuales.

En una consulta realizada anteriormente por finanzas.com, el analista de GVC Gaesco, Juan Peña, aseguraba que la entrada de un socio industrial podría ayudar a Telefónica a producir mejores contenidos, o a distribuir de otra manera para llegar a más usuarios a la vez que alivia sus costes.

Vivendi, además, figuraba en la lista del analista como un actor de relevancia en este ecosistema de posibles adquisiciones.

Telefónica, de momento, ha preferido enterrar esta posibilidad, dejando claro que el futuro de Movistar+ pasa indiscutiblemente por el fútbol español.