El alquiler desafía al Gobierno Sánchez con subidas de rentas del 4,9%
Un contrato de alquiler con una renta de 700 euros se actualiza a 734 euros
El precio del alquiler de la vivienda en España avanza con firmeza. Lejos de moderar las rentas ante la advertencia del Gobierno de coalición del PSOE y Unidas Podemos de regular este mercado, enero registró una subida del 4,87%.
Se trata de una cifra leventemente inferior al 4,99% con el que se cerró el ejercicio anterior y que supuso la más alta desde el 2015. De esta forma, un contrato firmado en enero del 2019 con una renta de 700 euros se actualizaría a 734,09 euros.
Estos datos, publicados por Alquiler Seguro según su índice actualizador de rentas de contratos de alquiler (ARCA), meten presión al Ejecutivo de Pedro Sánchez.
El director comercial de la firma David Caraballo, indica que a partir de ahora “todo dependerá de las decisiones políticas que plantee el nuevo gobierno”. Así, ha recordado que el alquiler es “muy sensible” a cualquier cambio.
El Ejecutivo se comprometió en su acuerdo programático a frenar las “subidas abusivas del alquiler”.
Para ello, proponía habilitar a las comunidades autónomas y ayuntamientos para que, a partir del Sistema Estatal de Índices de Referencias de Precios del Alquiler de Vivienda, pudieran limitar las subidas mediante un indicador de precios de acuerdo a una metodología “objetiva y sujeta a revisión periódica”.
La desigualdad como consecuencia de la regulación
Pero el Banco de España ha advertido de los riesgos a medio-largo plazo de inseminar en el mercado medidas de control de precios, informa la revista INVERSIÓN en su número de esta semana.
La entidad supervisora española destacó que una de las consecuencias será la segmentación tanto del propio mercado de la vivienda como de la población según sus condiciones socioeconómicas.
Y, además, advirtió de que se incrementarían los precios en sectores no regulados. Prueba de ello es el aumento del 36% de los mismos en ciudades como Berlín desde el 2015.
Por lo tanto, el resultado sería el aumento de la desigualdad. “Son un brindis al sol que en un mercado tan desequilibrado entre la oferta y la demanda se pueden volver en contra, aumentando los niveles de economía sumergida y provocando la retirada de muchas viviendas”, critica José María Alfaro, presidente de la Federación de Agentes Inmobiliarios (FAI).
De hecho, desde FAI consideran que la contracción de la oferta puede situarse cerca del 15%.
Caraballo recuerda que en el 2019 el anuncio de políticas reguladoras de los precios provocó el efecto contrario al que se buscaba: se incrementaron las rentas de los nuevos contratos por la contracción de la oferta.
"Lo que el mercado necesita son políticas de viviendas reales, que consideren los intereses y necesidades de inquilinos y propietarios y que ayuden a satisfacer la demanda de inmuebles en alquiler", ha remarcado.
