La rentabilidad del alquiler baja un 15% en Barcelona

Tras su elevado crecimiento durante los últimos años, el mercado del alquiler ha alcanzado cierta estabilidad en la ciudad de[…]

Tras su elevado crecimiento durante los últimos años, el mercado del alquiler ha alcanzado cierta estabilidad en la ciudad de Barcelona. La rentabilidad bruta ha disminuido un 15% interanual hasta llegar al 4% debido al aumento en los precios de la vivienda y el estancamiento de los precios de alquiler, indican en la firma Fincas Blanco. Por su parte, en el área metropolitana de la capital catalana la rentabilidad bruta alcanza una media del 6,5% y se convierte en una de las zonas más rentables del país.

En la actualidad, un alquiler cuesta una media de 950 euros mensuales en Barcelona, mientras que en la corona metropolitana el valor alcanza los 800 euros. En cuanto al valor de la vivienda, el otro factor determinante para conocer la rentabilidad bruta además del precio del alquiler, Barcelona ronda los 4.600 euros/m2, mientras que en el área metropolitana la media es de 2.600 euros/m2, casi un 45% más barato. Esta diferencia provoca que los compradores se inclinen por el área metropolitana como primera opción para la inversión.

"El interés por la inversión inmobiliaria en la primera y segunda corona metropolitana de Barcelona se ha incrementado mucho en los últimos años. La cercanía con una ciudad tan importante como la capital, las buenas comunicaciones, los precios de los alquileres y el valor de compra de los inmuebles estimulan el crecimiento en esta parte de la provincia", indica Mercedes Blanco, socia directora de Fincas Blanco.

¿Cómo se calcula la rentabilidad bruta de un inmueble en alquiler?

Para calcular la rentabilidad bruta del alquiler es necesario conocer el valor del inmueble y el precio de alquiler. Por ejemplo, si tomamos un piso de 60 m2 en L'Hospitalet comprado por 150.000 euros y que tiene 800 euros de ingresos mensuales, se deberá multiplicar la mensualidad por 12 (800*12 = 9.600), a este valor dividirlo por el precio del inmueble (9.600/150.000 = 0.064) y luego multiplicarlo por 100 (0.064*100 = 6,4). En este caso, la rentabilidad bruta es de 6,4%. Sin embargo, si tomamos un piso de 60 m2 en Barcelona que ha costado 276.000 euros y tiene 950 euros de ingresos mensuales, la rentabilidad bruta será un 4,1%.

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