Las lecciones de los 636 puntos
¿RECUERDAS? ● El primer estío del Gobierno Rajoy condensó en 90 días los males financieros de España. La prima de riesgo enloqueció
La prima de riesgo española trepó hasta los 636 puntos el 23 de julio de 2012. Es el mayor diferencial registrado sobre el bund alemán. Aunque ese fue el día más dramático, durante toda la temporada se midieron cotas que no cayeron de los 489 puntos. Así julio, agosto y septiembre. Una década después, las dudas sobre la solvencia de España arrecian.
El BCE tiene un nuevo programa de «asistencia» a los bonos «periféricos» y, nuevamente, existe condicionalidad. Sin embargo, el «whatever it takes» de Mario Draghi es hoy el «ex ante» de Christine Lagarde. Es decir, de «lo que haga falta» al «depende». El mecanismo que ultiman en el BCE está limitado y con unas contraprestaciones que se resumen en armar unos presupuestos equilibrados.
Dicho de otro modo, antes de pedir financiación a Fráncfort habrá que atar en corto el déficit.
Los paralelismos matizados (la situación actual tiene pocas probabilidades de alcanzar los niveles de dramatismo de 2012) quizá inviten a pensar que las estrategias para invertir aquel verano puedan servir para capear la situación actual. Como hace diez años, toca ser muy cuidadoso con la renta variable. Una de las diferencias es que, esta vez, la renta fija rubrica ciertas operaciones de refugio.
En cualquier caso, si el número 863 de Inversión recomendaba al lector «ser más activo que nunca», quizá se deba tomar nota de nuevo. Las vacaciones no deberían relajar la vigilancia sobre el patrimonio. Y es que, como se señalaba en aquel histórico número, «cuando el Estado tiene necesidades financieras, el ahorro peligra».