Los bancos descubrieron el mayor de sus peligros
Las entidades financieras fueron el ojo del huracán de la bolsa española en 2012 y eso que, de inicio, algunos indicadores invitaban a pensar que el sector estaba inflavalorado y que las entidades cotizaban a un precio atractivo, que ofrecía un interesante potencial.
LEGADO ● Las entidades financieras fueron el ojo del huracán de la bolsa española en 2012 y eso que, de inicio, algunos indicadores invitaban a pensar que el sector estaba inflavalorado y que las entidades cotizaban a un precio atractivo, que ofrecía un interesante potencial.
Pero a principios de dicho ejercicio, la revista INVERSIÓN adelantó que está no era la radiografía correcta del sector. La clave estaba en los balances, llenos de activos tóxicos y sobrevalorados que más pronto que tarde tirarían las cotizaciones a la baja. Además, había otro indicador que servía de pista a los inversores: las previsiones de beneficios.