Sofía Mendes, socia de Arcano Partners, es una mujer con más de 20 años de experiencia profesional asesorando a instituciones financieras en fusiones, adquisiciones y transacciones en el mercado de capitales. 

Entre otras operaciones, Mendes ha asesorado al FROB en la desinversión de Bankia y en la resolución de Banco Popular que llevó a su venta a Banco Santander, así como la ampliación de capital de esta última institución financiera, en 2017.

Antes de Arcano, trabajó en firmas de reconocido prestigio como JP Morgan y KPMG. 

La conciliación con la vida familiar

Durante una entrevista con Inversión Womenvalue, Mendes explicó que ha podido realizar este trabajo tan exigente y conciliarlo con su vida familiar (tiene dos hijos de 9 y 12 años) gracias al apoyo de su marido y de su familia pero, sobre todo, porque es un trabajo que le motiva y le satisface pese a ser “tan exigente en horas”. 

Asimismo, reconoció la evolución que se ha producido en el conjunto de la sociedad en lo relativo a la conciliación familiar, gracias a avances como la ampliación del permiso de paternidad. “Estamos viendo una evolución positiva en ese sentido”. 

Preguntada por la importancia de tener referentes femeninos en posiciones corporativas de poder para avanzar en igualdad, Mendes explico que, en su caso, tuvo la suerte de contar con una mujer que ejerció este papel en JP Morgan. 

“El hecho de tener a una mujer en un puesto directivo te motiva, te anima, te hace ver que es posible llegar a esa posición”, explicó. 

Cuotas de género para avanzar en igualdad

Por último, preguntada por la utilidad de las cuotas de género para avanzar en igualdad, relató que tiene una posición mixta al respecto, pero que tiende más hacia el sí, al menos temporalmente. 

“Las cuotas son una forma artificial, que es lo que no me gusta, de intentar alcanzar un objetivo, cuando lo que se debería es promocionar el performance. Pero, el cambio es muy difícil y las cuotas, aunque temporalmente, te pueden ayudar a alcanzar ese objetivo”, aseveró durante la entrevista.  

En todo caso, recordó que la heterogeneidad es muy beneficiosa para las organizaciones, por lo que deberían ser las propias compañías las que fomentasen la presencia de mujeres por iniciativa propia (de hecho, muchas ya lo están haciendo). 

“Recuerdo que mi mentora decía que las mujeres somos diferentes de los hombres. Pero incluso profesionalmente tenemos que ser conscientes de que somos diferentes y no intentar ser como los hombres”.

“El hecho de ser diferente es una ventaja, la diversidad crea valor porque puedes ver las cosas de manera diferente, hacerlas de manera diferente, ser creativo y eso en un trabajo como el nuestro es insustituible, es algo que no puedes sustituir por inteligencia artificial o cualquier otra tecnología”.

“Y eso es el valor añadido que deberíamos promocionar para que haya más mujeres, esa visión distinta de las cosas”, apostilló.