Para usar una analogía adecuada, las grandes acciones tecnológicas son como los cohetes de Elon Musk. Aparentemente más allá de la atracción gravitacional de la Tierra, ahora están probando las leyes de la física (con la excepción de Tesla, que de repente está sucumbiendo a la gravedad). En un lenguaje deudor de la ciencia ficción, algunas relaciones de mercado bien establecidas están cambiando.

Los rendimientos de los bonos se dispararon el pasado viernes, gracias a un sólido informe de empleo de EEUU. ¿Qué efecto tuvieron en el mercado de valores? Las acciones tecnológicas tuvieron un gran día.