Amazon lideró un año récord para las compras corporativas de energía renovable en todo el mundo, mientras las empresas amplían los esfuerzos para limpiar sus fuentes de energía para combatir el cambio climático. 

El gigante del comercio electrónico, fundado por Jeff Bezos, representó el 20 por ciento de un récord de 31,1 gigavatios (GW) de capacidad de energía limpia comprada por firmas en 2021, según un informe de BloombergNEF.

Los compradores corporativos representaron más del 10 por ciento de toda la capacidad de energía renovable agregada a nivel mundial el año pasado, de acuerdo con estos analistas.

Un porcentaje que equivale a más de un tercio de la capacidad de generación de California. “Ya no es cuestión de si la adquisición corporativa de energía limpia crecerá cada año, es cuestión de cuánto más”, señala Kyle Harrison, titular de investigación de sostenibilidad en BNEF.

Más de la mitad de la energía para los gigantes tecnológicos

Las cifras reflejan un cambio de rumbo en la industria tecnológica a la hora de adquirir un mayor protagonismo en la transición ecológica.

“Más empresas están asumiendo nuevos compromisos de sostenibilidad, los costes de las energías renovables están disminuyendo bruscamente y reguladores de todo el mundo se están dando cuenta lentamente de que la energía limpia podría ser una solución en la descarbonización del sector privado”., explicó la analista. 

Los gigantes tecnológicos fueron los mayores compradores corporativos de energía renovable, dando cuenta de más de la mitad de los acuerdos el año pasado, según el informe. 

Amazon firmó acuerdos por 6,2 GW, lo que eleva su capacidad total de energía limpia a 13,9 GW y le otorga la duodécima cartera más grande de energía limpia entre todos los tipos de empresas.

Amazon y sus bajos rating ESG

A pesar del récord en las compras de energía en el ejercicio en el que Bezos voló al espacio, su grupo no es precisamente un gigante en ‘ESG’. Al menos, así lo reflejan los principales rating de calificación.

Amazon cuenta con la segunda peor nota que concede ISS, el mayor proxy advisor del mundo, con un 9 sobre 10, siendo está última la peor posible.

ISS ya ha realizado incluso campañas contra las deficiencias ESG del conglomerado. En mayo del año pasado, el proxy aconsejó a los accionistas votar a favor de una propuesta para forzar a Amazon a realizar una auditoría racial; una iniciativa que finalmente obtuvo el respaldo del 44 por ciento del accionariado, porcentaje que la compañía consideró “suficiente” para llevarla a cabo.

Otro de los proveedores de rating, MSCI, concede una calificación ‘BBB’ a Amazon, por debajo de sus pares del sector tecnológico.

La agencia Morningstar, en su ranking Sustainalitycs, sitúa a la mulinacional en una zona de riesgo ESG alto, es decir, por encima de los 30 puntos.