Iberdrola, Siemens Gamesa o Acciona son algunas de las empresas del IBEX con intereses en los negocios que se podrían ver favorecidos por el giro de la futura administración de Joe Biden hacia la sostenibilidad. Pero también otras como Sacyr. Repsol, por el contrario, puede verse perjudicada por medidas restrictivas sobre el sector.

El futuro presidente norteamericano dibujó durante su campaña un plan ‘verde’ que pasa por el retorno del país al Acuerdo de París y dejar atrás el negacionismo de Donald Trump hacia los efectos negativos del calentamiento global.

La incógnita del ‘voto’ de Georgia

Una cita clave para saber cuál será el equilibrio de poder real en Estados Unidos y el margen que tendrá Biden para sacar adelante su política contra el cambio climático son las elecciones al Senado en Georgia el próximo 5 de enero.

En ellas se resolverá si los republicanos retienen la mayoría del Cámara Alta, o la ceden. Para que los Demócratas consigan el liderazgo, deberían lograr las dos sillas que reparte este Estado. Ese triunfo daría más margen al presidente norteamericano para legislar.

No obstante, se prevé que los republicanos sean más flexibles la próxima legislatura en materia medioambiental, lo que permitiría sacar adelante algunas de las propuestas del estadounidense.

Por el momento, el programa electoral verde de Biden ha creado muchas expectativas y puede suponer un golpe o un revulsivo para las industrias afectadas.

• Combustibles fósiles

Uno de los negocios que podrían sufrir es el del gas y el petróleo. Biden parece dispuesto a limitar las perforaciones de gas y de petróleo tanto en tierra como en mar, o bloquear la construcción de nuevos oleoductos. Otro de los campos que quiere modificar es el de los carburantes.

Este cambio de tono ya ha provocado que algunas grandes empresas petroleras, como Exxon, se hayan visto forzadas a improvisar planes de reducción de emisiones.

En España, Repsol cuenta con una importante exposición a Estados Unidos, y se podría ver afectada de alguna manera por la nueva legislación.

Repsol controla uno de los mayores campos de gas del mundo en EEUU, el Marcellus Shale

Entró en el país en 2016 y cuenta con uno de los mayores campos de gas del mundo, Marcellus Shale. En 2017, en Alaska descubrió el mayor pozo de hidrocarburos del país en veinte años. Cepsa, por el contrario, no cuenta con presencia significativa.

Por el contrario, sí podría pesar negativamente sobre Ferrovial. Uno de los negocios que desarrolla este grupo al otro lado del Atlántico es dar servicios a la industria del gas y el petróleo. Lo desarrolla con las marcas Timec y HRI. Un debilitamiento de estas industrias podría afectarle negativamente.

• Energías renovables

El gran eje las promesas electorales de Joe Biden pivotan sobre la energía verde. Se espera que el presidente electo suscriba el compromiso de que Estados Unidos generará cero emisiones antes de 2050.

Para conseguirlo, una de las herramientas sería implementar un estándar de generación eléctrico 100% libre de emisiones, que supondría desmantelar en 15 años todas las plantas de generación mediante carbón y gas.

Un salto que requería de fuertes inversiones. De hecho, Biden habría diseñado un plan de dos billones en inversiones para energía renovable y en compensaciones para las áreas más contaminadas.

Biden ha diseñado un plan de inversiones por dos billones de dólares

Un proyecto del que varias empresas españolas se podrían beneficiar. Iberdrola es la más evidente, ya que es un jugador renovable muy relevante en Estados Unidos a través de su filial Avangrid.

La compañía que preside Ignacio Sánchez-Galán, ha mantenido una política muy activa de inversiones en Estados Unidos, que la coloca en un punto de partida muy ventajoso.

La última adquisición -anunciada en octubre- y que supondrá la fusión de Avangrid con PMN la convierte en la tercera mayor empresa de renovables de Estados Unidos, con presencia en 24 estados.

Siemens Gamesa ya participa como proveedor de un megaproyecto en Virginia

Siemens Gamesa, como fabricante de aerogeneradores, también se podría ver beneficiada. No sería la primera vez que exporta productos a Estados Unidos.

De hecho, en enero fue seleccionada como proveedor preferente del proyecto Dominion Energy, en Virginia, que es un centro de generación renovable de grandes dimensiones. De hecho, es una de las infraestructuras claves con las que este Estado espera lograr que toda su energía sea limpia en 2045.

Acciona también cuenta con activos renovables en Estados Unidos. Explota varios campos de aerogeneradores y también una planta de generación solar.

• Infraestructuras verdes

El otro punto del programa de Biden del que se pueden aprovechar las empresas españolas es el de infraestructuras verdes.

Bajo este paraguas se incluyen proyectos de construcción de áreas de comunicación verdes, como anillos verdes, o también de recuperación urbanística y gestión del agua.

Otra vez Acciona -con su filial Acciona Agua que tiene sede en Estados Unidos- u otros representantes del sector constructor, como Sacyr, que ya han logrado concesiones en el país en materia de distribución de agua o energía, podrían ampliar su cartera de proyectos.

Ferrovial, que ya tiene experiencia en la puesta en marcha de infraestructuras de agua en Estados Unidos en este campo sí podría sacar partido a los cambios en el inquilino de la Casa Blanca.  

Por último, ACS también opera en el país, tanto en el segmento de infraestructuras, como en el de servicios industriales, por lo que es otra candidata a ver crecer su volumen de negocio.

Según el ICEX, más de 400 empresas españolas están presentes en Estados Unidos, por lo que cualquier plan de inversiones es muy positivo para nuestro tejido empresarial.