Los índices sostenibles de la bolsa española resisten la corrección mejor que el IBEX
El Índice SOCIAL INVESTOR y el FTSE4Good IBEX baten al mercado esta semana, demostrando que la ESG quita volatilidad a las inversiones
La crisis de la lira turca, tras el inesperado relevo del Gobernador del Banco Central de Turquía; y el bloqueo del Canal de Suez, después de encallar un buque carguero, han sumido a los mercados bursátiles en una de las semanas más complicadas de lo que va de año. Más aún a puertas de cerrar el primer trimestre, que será determinante para marcar la tendencia de los parqués de cara al conjunto del ejercicio 2021.
Y en esta corrección bursátil, que ha lastrado sobre todo a algunos valores -como el BBVA, por su exposición a Turquía; o Repsol, por el crudo, que este jueves se dejó más de un 3,3%- ha golpeado con mucha menos intensidad a los dos índices españoles que están ligados a la sostenibilidad.
Por un lado, el Índice SOCIAL INVESTOR (SI), que encara la sesión del viernes con un mínimo retroceso semanal, del 0,3%. Por otro, el FTSE4Good IBEX, que se apunta en este mismo periodo una ligera subida, del 0,9%. En cambio, el IBEX 35 acumula en estas cuatro sesiones una caída del 1,23%.
De esta forma, queda, de nuevo patente (porque ya sucedió al analizar el ejercicio 2020, marcado por la crisis del Covid) que los valores más comprometidos con la consecución de criterios ESG (medioambientales, sociales y de buen gobierno corporativo) son más resilientes en caso de tormenta en el parqué.
Simplemente, minimizan el impacto de las caídas y se convierten en valores refugio para los inversores que busquen exponerse a la ESG a la vez que se enfocan en la rentabilidad a largo plazo. Los índices son una fuente de información para poder contrastar de manera sencilla las diferencias en evolución de los activos.
¿En qué se diferencia el FTSE4Good IBEX del Índice SOCIAL INVESTOR?
Esta semana ha echado a andar el Índice SI sigue la pauta ‘best in class’, de manera que forman parte de él aquellos valores que logran las mejores notas por parte de tres de las principales agencias de calificación ESG.
En concreto, los que obtienen el rating AA o AAA que otorga MSCI, presentan riesgo medio o bajo a cuestiones ESG, según Sustainalytics y que, además, logran una de las tres medallas (oro, plata o bronce) en materia de sostenibilidad que ‘concede’ la multinacional S&P.
De esta forma, la pertenencia a Índice SI está ligada a la consecución de objetivos y análisis que marcan estas tres agencias de calificación.
Además, es un índice que otorga relevancia a sus componentes de forma independiente a su capitalización.
En cuanto a su revisión, el selectivo SI se pondrá bajo la lupa de la redacción de Social Investor de forma periódica y, especialmente, cada tres meses, con la conclusión de cada trimestre del ejercicio. Además, con la posibilidad de exclusiones al final de cada mes, en caso de que haya una rebaja de calificación por parte de, al menos, dos agencias.
Por su parte, el FTSE4Good IBEX, que echó a andar hace más de una década, forma parte de la familia FTSE4Good, que abarca diferentes índices ESG en distintas geografías, por ejemplo, de la región asiática o de mercado emergentes; y que forma parte de FTSE Russell, la matriz de esta familia de índices bursátiles y filial del London Stock Exchange Group (LSEG).
El el FTSE4Good IBEX tiene en consideración a las compañías cotizadas que integran el FTSE Spain All Cap Index y el IBEX 35. Sin embargo, en él, el peso de cada compañía está ponderado, en función de su capitalización.
En el FTSE4Good IBEX los valores están ponderados para que ninguno tenga un peso superior al 10%
En cuanto a qué compañías forman parte de él, se trata de aquellas que cumplen los criterios ESG que determina el comité asesor en esta materia de FTSE Russell. En total, 25 empresas, entre las que están ‘blue chips’ del Ibex, como Santander, Telefónica, Repsol o Inditex; pero también otras cotizadas de menor ‘tamaño’, como OHL, Mediaset o Prisa
Y, respecto a su ponderación, para construir el índice FTSE se tiene en cuenta que ninguno de sus componentes tenga un peso mayor al 10%, lo que conlleva diferentes correcciones.
Incluye otros condicionantes respecto al ‘free float’, como que excluye aquellas acciones controladas por administraciones públicas (por ejemplo, por el Estado), por directivos o por empleados de las compañías. Por otro lado, se revisa dos veces al año, al cierre de mayo y de noviembre.
Esta composición hace que sea más complicada su replica por parte de un inversor minorista, en comparación con el Índice SI, que actualmente integran nueve empresas: Amadeus, BBVA, Caixabank, Enagás, Endesa, Iberdrola, Inditex, Naturgy y Red Eléctrica.
Otros grandes índices internacionales sostenibles
Tanto el Índice Social Investor como el FTSE4Good Ibex están enfocados en el mercado bursátil español pero, más allá de nuestras fronteras, el abanico de posibilidades se amplía de forma significativa.
Basta con comprobar el portfolio de MSCI o de S&P, las dos multinacionales con décadas a sus espaldas en la indexación bajo criterios ESG.
En el caso de S&P, el más renombrado, probablemente, sea el Dow Jones Sustainability World Index, lanzado hace más de 20 años, en 1999. La multinacional tiene en cartera más de una veintena de índices ligados a la ESG, tanto de grandes cotizadas, como enfocados en MidCap.
Por su parte, MSCI -que también puso en marcha la indexación bajo criterios de sostenibilidad en la década de los 90- abarca también esta opción ESG a la renta fija. En total, asegura, cuenta con una cartera de 1.500 índices ESG entre renta fija y variable.
De esta forma, queda patente, que las opciones internacionales para los inversores enfocados en la ESG son muy amplias. Mientras, en España, aún queda camino por recorrer dado que, además, las rentabilidades bursátiles de la ESG animan a avanzar en ese camino.