Los asesores financieros abren la caja de Pandora de la formación: ¿la actual sirve?

Los asesores financieros escuchan a los líderes de la profesión poner en duda el sistema de formación durante una animada edición del Foro Inversión Asesores Financieros, que batió récord con 350 profesionales

“¿Para qué sirve la formación?” La polémica centró los debates del Foro Inversión Asesores Financieros, que la revista Inversión celebró, con récord de asistencia, el miércoles en la Bolsa de Madrid. “Muchos asesores, muchas veces, hacen horas de formación simplemente por lograr un check” en su expediente, se sinceró la cofundadora de finReg360, Sara Gutiérrez. Nadie en la sala que acogía el debate la contradijo, aunque sí hubo matices.

Y así surgió el debate: la utilidad del reciclaje, la de esas horas que los asesores financieros dedican a estudiar, quedó bajo el manto de la autocrítica. “Más que horas, necesitamos tener muy claro a qué dedicamos esas horas”, aseguró el director del Instituto BME, Enrique Castellanos.

En un momento complejo, no sólo por la cambiante regulación, sino por la eclosión de la inteligencia artificial, de las finanzas conductuales y de la ESG, cómo actualizar los conocimientos generó una especie de consenso en torno al cual se puso en duda las certificaciones basadas en horas más que en conocimientos.

Así, Castellanos se decantó por un asesor financiero más versátil que especialista. “En este mundo cambiante, es mejor saber un poquito de todo”, apuntó. Y a pesar de las dudas, insistió en la necesidad de que los asesores financieros se formen: “El conocimiento genera confianza”, afirmó.

En esta idea de aspirar hacia una formación de calidad logró el consenso del aforo, incluido el de Santiago Satrústegui, CEO de Abante Asesores y presidente de EFPA España. Este referente para la profesión abogó por regular la formación de los asesores financieros. “La formación es muy importante. Lo pensábamos (en EFPA España) incluso antes de que lo exigiera la regulación”, señaló.

El Foro Inversión Asesores Financieros se celebró mientras los mercados no quitaban ojo a la nueva ola bélica en Oriente Medio. El lanzamiento de misiles de Irán sobre Israel elevó, en primera instancia, el precio del petróleo un 5% hasta los 75 dólares. “Forma parte de la reacción esperada”, aseguró el profesor Javier Santacruz, encargado de la conferencia de macroeconomía.

Aunque todo lo que tiene que ver con aquella región es complicado de prever, lo esperado es que los activos “vuelvan a la normalidad” una vez descontada la noticia. Es la reacción “reflejo” ante cualquier conflicto. Sin embargo, suma y sigue. Y es que los focos de inestabilidad se agregan a unos datos más débiles de lo esperado en muchas áreas de interés para los asesores.

La volatilidad será estructural

“Tenemos que acostumbrarnos a que la volatilidad ha vuelto y se quedará”, advirtió a la audiencia del cónclave el director en Iberia y Latam de BNY Investments, Ralph Elder. Volatilidad que viene alimentada no sólo por los conflictos ya conocidos, sino también por los que puedan surgir e incluso a rebufo de un resultado electoral ajustado en los Estados Unidos.

La volatilidad, a pesar de las connotaciones de la propia palabra, no es ni buena ni mala en sí misma. E incluso para el director de Banco Mediolanum en la zona Madrid-Centro, Juan Massana da sentido a la profesión de los asesores. “La inteligencia artificial por ahora no puede gestionar la volatilidad”. “Dada su complejidad –continuó— esta responsabilidad sigue recayendo sobre los asesores y eso es bueno, buenísimo”, explicó.

Elder ejemplificó los efectos de la volatilidad tomando como referencia el desempeño de las temáticas: si en el año 1900 hubiéramos invertido un dólar en el S&P 500, ahora tendríamos unos 900. Mientras que, si ese dólar lo hubiéramos movido para reinvertirlo, por ejemplo, siguiendo el camino de la temática de dividendos, el importe amasado se habría multiplicado exponencialmente hasta los 70.000.

Tras el crecimiento siempre está la volatilidad, con el evidente control de los riesgos que cada inversor quiera asumir.

Durante la mesa de mercados del Foro Inversión Asesores Financieros, los speakers recordaron que se está produciendo una rotación hacia las empresas de pequeña y mediana capitalización, que ahora mismo presentan niveles de valoración más atractivos que las grandes. 

Asimismo, dieron cuenta de que se trata de compañías que habitualmente se ven beneficiadas en entornos de caídas de los tipos de interés, que también destacan por una mayor alineación de las inquietudes de inversores y directivos, y que pueden brillar en un contexto de desglobalización. Así lo resumió Victoria Torre, responsable de oferta digital de Self Bank by Singular Bank. 

Por eso, pueden ser una buena alternativa “con la única salvedad de que no se produzca una recesión”, avisó Sébastien Senegas, director de Edmond de Rothschild en Iberia y Latam. 

El impacto del recorte de tipos de interés

Senegas también hizo un repaso por los sectores que se pueden ver beneficiados en este entorno de recortes de los tipos de interés, como el inmobiliario, el consumo, la salud y la tecnológicas. 

Por su parte, el analista senior de mercados de capitales de Bankinter, Rafael Alonso, dijo a los asesores financieros que prefiere la renta variable de los Estados Unidos a la europea pero, aun así, mencionó algunas compañías españolas que le parecen interesantes, como las utilities y las socimis. 

“Colonial y Merlin Properties cotizan con descuentos sobre el valor neto de los activos de entre el 30 y el 40 por ciento”, ejemplificó. 

Este foro de la revista Inversión contó con el impulso de Banco Mediolanum, BNY Investments y Edmond de Rothschild AM; y con la colaboración de Bolsas y Mercados Españoles (BME) y EFPA España.

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