La fiesta acaba para las renovables (de momento)
El desinterés de los fondos y el exceso de oferta frenan las salidas a bolsa de las empresas verdes. Pero no son las únicas causas
Las empresas de energías renovables se han convertido en el último año en las protagonistas de la bolsa española y sus motivos para serlo han cambiado de forma radical. Pasaron de cerrar 2020 acaparando los primeros puestos de los índices españoles con revalorizaciones, que superaron el 200 por ciento, a hundirse este año en la parte baja de la tabla.
Dos casos a destacar son los de Solaria, que alcanzó en 2020 una revalorización del 247 por ciento situándose a la cabeza del IBEX 35, y el de Siemens Gamesa, que ocupó el segundo lugar con una escalada del 111 por ciento. Pero sus cotizaciones se han dado la vuelta este año y son las que suman mayores pérdidas en el selectivo español. Solaria se deja un 36 por ciento y Siemens Gamesa, un 22 por ciento.