Pocas veces hemos visto a los expertos tan alineados como en esta crisis. Todos han coincidido en mantener la calma y la prudencia, en no precipitarse en el regreso al mercado hasta que no se despejen las incertidumbres que mantiene abiertas la invasión de Ucrania. Aunque se han visto recortes que han dejado un buen número de valores a precios muy atractivos, ninguna voz ha animado a aumentar la exposición al mercado.

En el foro Banca Privada, organizado por esta revista, los directores generales de las grandes entidades financieras explicaron lo errónea que era la estrategia de correr detrás de las acciones, de intentar seguir al mercado. Con sesiones en las que se han visto caídas y subidas del 6 por ciento en cuestión de horas es prácticamente imposible acertar con las decisiones. «Lo mejor es quedarse atado al árbol», comentaban.

Pero esta cautela, esta prudencia, no debe confundirse con inacción. El inversor debe diseñar su estrategia para abandonar las posiciones de liquidez en cuanto aparezcan las señales de regreso al mercado. En este número de Inversión centramos nuestro interés en 20 compañías que tienen la capacidad suficiente para, una vez se aclare el panorama, incrementar la rentabilidad en bolsa y no descuidar la retribución al accionista. Son 20 acciones para recuperar la iniciativa.