Apple Inc ha logrado sortear su mayor crisis desde la pandemia, al menos por ahora. Los aranceles del 125% impuestos por Donald Trump a los productos fabricados en China amenazaron con trastocar su cadena de suministro tan gravemente como lo hicieron los problemas de la Covid-19 hace cinco años. El viernes por la noche, el presidente estadounidense otorgó a Apple una importante victoria, eximiendo a muchos productos electrónicos de consumo populares, como iPhones, iPads, Macs, Apple Watches y AirTags.

Un nuevo arancel sectorial, más bajo, aún podría aplicarse a los productos con semiconductores, y se sigue aplicando un arancel del 20% a los productos electrónicos enviados desde China. Durante el fin de semana, Trump prometió que seguirá aplicando aranceles a teléfonos, ordenadores y productos electrónicos de consumo, presentando las exenciones como un paso de procedimiento en un esfuerzo más amplio por reestructurar el comercio estadounidense.