Un Irán con bombas nucleares nunca ha estado tan cerca como ahora
El fracaso de los ataques con misiles convencionales contra Israel y la incapacitación de Hezbolá dejan claro que Irán carece de poder de disuasión, a menos que desarrolle un arsenal nuclear
Hay buenas razones para que Israel no ataque el programa nuclear de Irán en su próxima represalia contra la República Islámica. Sin embargo, la lógica para un ataque preventivo nunca ha sido tan convincente, precisamente porque la justificación de Teherán para construir un arsenal nuclear tampoco ha sido tan sólida. Esto es inherentemente inestable y peligroso.
Las últimas semanas han transformado la situación de seguridad de Irán, no menos que la de Israel. Hasta entonces, Hezbolá, la milicia libanesa que el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán (CGRI) pasó décadas alimentando para amenazar a Israel, parecía formidable. Pero después de una de las operaciones de decapitación más efectivas en la historia militar, Irán ya no puede confiar en Hezbolá para su "defensa avanzada". Las tropas de Hezbolá están luchando por su propia supervivencia.