La gran frustración Merkel
La burocracia y la aversión al riesgo cortan las alas al legado de innovación de la canciller alemana
Fue una de las ideas más radicales de la canciller Angela Merkel durante su último mandato: una nueva agencia que sacaría al mercado innovaciones alemanas pioneras, como una forma de limpiar los océanos de todo el mundo y una terapia para el Alzheimer.
Pero dos años después de que Merkel presentara el proyecto, animada tanto por su propia formación científica como por la preocupación de que Europa pudiera estar quedándose atrás, la agencia SPRIN-D para la innovación disruptiva está sufriendo por las limitaciones institucionales, culturales y presupuestarias.