La regulación europea no solo se está desarrollando alrededor de las emisiones de gases de efecto invernadero. Al igual que ha sucedido con otros productos de gran consumo, como los electrodomésticos, la Unión Europea trabaja en nuevas normativas, cuya consulta pública se cierra el próximo 28 de septiembre, que buscan ‘ecologizar’ los smartphones.

Por una parte, plantea un reglamento de ecodiseño, que buscaría mejorar el desempeño ambiental de estos productos y también el de las tables y que afectarían a grandes empresas como Apple y Samsung e indirectamente a las operadoras, que sin embargo, ya se están anticipando.

La propuesta normativa obligaría a los fabricantes a mantener componentes para el producto durante cinco años desde su lanzamiento, se incluyen medidas para favorecer su reaprovechamiento, ya que la Comisión Europea percibe que se desechan antes de que realmente sean inútiles.

Para favorecer el reciclaje seguro, también se insta a mejorar el sistema de borrado de datos, de manera que los usuarios puedan donar más fácilmente estos productos y puedan reutilizarse y arreglarse. Incorpora la normativa el modelo francés que puntúa la capacidad de un producto para ser reparado y utilizado.

En paralelo, en otra propuesta de reglamento, la Comisión propone un etiquetado energético para estos productos.

Aunque los fabricantes de móviles y las operadoras llevan tiempo trabajando en mejorar tanto el rendimiento energético, como la reutilización de materiales y el reciclado de productos –Telefónica ha incluido objetivo concretos de reciclado de móviles en su plan de economía circular-, será un esfuerzo adicional.

“Los fabricantes de teléfonos inteligentes y tabletas pueden tener que responder a dos actualizaciones significativas en los requisitos de diseño ecológico para sus productos en una sucesión relativamente rápida”, valora Latham & Watkins.

Importantes esfuerzos económicos

Aunque es habitual que se hable del gran esfuerzo inversor que están realizando sectores como el petrolero y gasistas y el de generación energética para afrontar la transición energética, los fabricantes de dispositivos móviles y las teleco también están asumiendo costes relevantes para sumarse al movimiento cero emisiones y a la reducción de consumo energético y uso de productos.

Samsumg, por ejemplo, ha puesto en los últimos días cifras a las inversiones a realizar para ser cero emisiones. El fabricante de móviles y también de otros dispositivos tecnológicos, como chips, ordenadores o televisiones, invertirá unos 5.000 millones de dólares para ser cero neto en 2030.

La compañía reconoce que la etapa de crecimiento de los últimos años le ha llevado a incrementar sus emisiones y ha establecido objetivos para eliminar las emisiones de alcance 1 y alcance 2 (las que genera de forma directa e indirecta para operar).

Samsung utilizará solo energía verde en sus fábricas en el extranjero en cinco años

Sin embargo, a diferencia de alguno de sus competidores, la compañía no ha fijado metas para las de alcance 3, aunque es un paso que dará en el futuro, de acuerdo con Bloomberg.

Una de las vías para descarbonizarse es que sus fábricas sólo utilicen energía renovable. Es un plan que va a poner en marcha en sus fábricas en el extranjero con un horizonte temporal de cinco años.

En las domésticas, sin embargo, ve muy complicado dar un paso similar, ya que la disponibilidad de fuentes de generación energética limpia son mucho menores. Corea es un gran dependiente de los combustibles fósiles.

La compañía no solo revisará el consumo energético de sus centros de producción. En su nuevo plan también contempla capturar y almacenar carbono y aplicar medidas para reducir el consumo de agua y de liberación de gases en la fabricación de chips.

Pero también se protege contra el incremento de regulación, porque otra de las líneas maestras de su nuevo plan es la mejora de la eficiencia energética y mejorar el sistema de recogida de residuos electrónicos para reciclaje.