Chris Hohn da un primer voto de confianza a Cellnex
Chris Hohn ha desembarcado en el capital de Cellnex con tranquilidad y por ahora ha dejado pasar la primera oportunidad para ejercer su tradicional presión climática públicamente
Chris Hohn ha empezado su trayectoria como accionista de Cellnex con bastante tranquilidad. El inversor, que se hizo famoso en España por forzar a AENA a incluir en sus estatutos la lucha contra el cambio climático, tras un careo con Teresa Ribera, ha ido construyendo en los últimos meses una participación -casi toda indirecta- en Cellnex, pero todavía no ha recurrido a sus tradicionales demandas públicas.
Por el momento, no se conoce que haya iniciado una campaña para que la compañía del IBEX se sume a la iniciativa 'Say on Climate', cuyo origen se remonta a 2019 y que entonces impactó en Ferrovial o en AENA-.
De hecho, desde noviembre de aquel ejercicio no consta que The Children's Investment Fund (TCI), la firma de inversión de Chris Hohn, haya lanzado nuevas cartas de 'engagement'.
En aquel primer paso, Hohn instaba a sus participadas a medir sus emisiones y a marcarse objetivos de reducción alineados con el Acuerdo de París.
A finales de 2020, añadía un paso más a su movimiento y lanzaba en noviembre "Say on climate", que instaba a las empresas a presentar a votación a la junta de accionistas un plan climático y a medir y comprometerse a reducir sus emisiones.
El año pasado, en España dieron ese paso tanto AENA, como Ferrovial (ambas participadas por Hohn) y también otras de las señaladas en aquella oleada de misivas, como S&P o Moody's.
Porque son bastantes las empresas que han recibido algún toque público por parte del inversor para forzarlas a hacer públicas sus emisiones y a asumir compromisos públicos.
Gigantes como Alphabet, Microsoft, Moody's o Vinci estuvieron afectadas por la campaña de engagement de 2019, en la que TCI envió cartas a muchas de sus participadas.
Directamente, además, también ha pedido la inclusión de puntos del orden del día en varias juntas de accionistas. Además del caso de en AENA, dio ese paso en Alphabet, Charter Communications, Union Pacific Railroad, S&P Global, Moody’s Corp, Canadian National Railway y Canadian Pacific Railway.
Silencio de cara a la junta de abril
En contraste con la actividad pública de 2019 y 2020, Chris Hohn se mantiene en silencio por el momento al respecto Cellnex, que es hoy su principal participada en el mercado español.
El inversor ha dejado pasar uno de las primeras oportunidades para hacer algún gesto público, al no solicitar introducir ningún punto adicional de cara a la junta de accionistas de Cellnex el próximo 26 de abril.
La compañía publicó la convocatorio el pasado 24 de marzo, por lo que ya se habría agotado el plazo (5 días) para poder presentar alguna petición para que, por ejemplo, una propuesta 'Say on Climate'.
En este sentido, Cellnex no ha recibido ninguna petición ni de Chris Hohn ni de ningún otro accionista.
Además, para, por ejemplo, tener influencia en la junta, tendría que reorganizar su participación. De acuerdo con la información disponible en la CNMV, Hohn cuenta con una participación del 5,795 en el capital de Cellnex, pero la mayoría está construida con derivados y son derivados que no dan derecho a voto.
La posición directa en acciones en de tan solo un 0,793 por ciento.
Hohn, además, digamos que está aterrizando en Cellnex, ya lleva poco tiempo como accionista de referencia. Fue en mayo de 2021 cuando cruzó la barrera del 3 por ciento del capital y partía con una posición directa de solo un 0,185 por ciento.
Los derivados que controla Hohn no le otorgan derechos de voto
Este año el inversor ha abandonado el consejo de AENA, pero llevaba mucho tiempo en el capital de la compañía participada por el estado antes de presionarla para que incluyera la sostenibilidad en sus estatutos.
La primera participación que consta es de 2015 (él se incorporó al consejo ese mismo ejercicio) y la primera campaña se produjo en 2019, aunque no fue hasta 2020, en plena pandemia, cuando forzó la votación en la junta de accionistas y fue apoyado por prácticamente todo el capital.
Cellnex, 'ocupada' en la sostenibilidad
El desembarco de Hohn en el capital no ha pillado a Cellnex desocupada en materia de sostenibilidad. De hecho, TCI no es el único accionista de la compañía que lidera Tobías Martínez que está comprometido con la lucha contra el cambio climático.
Cellnex es una de las compañías del IBEX que más ha reforzado sus notas ESG en los últimos meses y que, a pesar de que todavía no se ha unido al grupo de españolas que han presentado a votación a la junta su plan de acción climático, o que se haya comprometido a ser cero neta en 2050, cuenta con planes específicos en ESG y con objetivos de reducción de emisiones a corto plazo alineados con Science Based Targets initiative (SBTi).
Según recoge en su informe integrado del año pasado, a lo largo de 2021, ha dado varios pasos relevantes. Además de la adopción de compromisos alineados con SBTi, la compañía se ha convertido en seguidora de Task Force on Climate-related Financial Disclosures (TCFD).
A falta de un modelo regulado, TCFD se está convirtiendo en un estándar voluntario muy extendido entre las cotizadas para informar sobre impacto climático, porque entre otras razones la apoyan no solo Hohn, sino también grandes inversores como BlackRock.
En el informe de 2021, también avanza progresos en materia de descarbonización. Cellnex espera consumir solo energía renovable en 2030.
Para 2025, había establecido la meta intermedia de que alcanzara el 40 por ciento, algo que la compañía ha cumplido.
También ha asumido el compromiso de reducción de emisiones scope 1, 2 y 3 (esto último de actividades relacionadas con combustibles y energía) en un 70 por ciento respecto a los niveles de 2020 para 2030.
En el caso de las emisiones indirectas (scope 3) de bienes y servicios adquiridos y bienes de capital, el compromiso es haberlas reducido en 2025 un 21 por ciento.
Estos compromisos, aunque solo a corto plazo, están alineados con los objetivos del Acuerdo de París y, de hecho, Cellnex realiza mediciones de todas sus emisiones, como puede verse en el gráfico.
En 2021, asimismo, publicó su primer informe anual de medioambiente y cambio climático.
Veremos si todo ello es suficiente para que Chris Hohn mantenga su silencio.