Los inversores abrazan la reinvención de las aseguradoras por el cambio climático
La startup Arbol descubre a los inversores el campo de los seguros paramétricos para agricultores, desarrolladores de energía e incluso hogares
El interés en las nuevas empresas que intentan revolucionar la industria aseguradora está aumentando al ritmo al que empeoran las catástrofes climáticas. La última señal: Arbol, con sede en Nueva York (EEUU), ha recaudado 60.000 millones de dólares en una ronda de financiación inédita.
Fundada en 2018, Arbol se especializa en una forma de indemnización específica pero de rápido crecimiento conocida como “seguro paramétrico”. A diferencia de las pólizas tradicionales que se vinculan con pérdidas reales, los pagos se activan mediante un parámetro predeterminado.
Por ejemplo, los agricultores y la aseguradora podrían acordar que 30 centímetros de lluvia por metro cuadrado en una hora es el umbral que daría lugar a los pagos. El proceso de reclamación simplificado permite a los agricultores reiniciar la siembra de cultivos de inmediato, en lugar de esperar semanas o meses para una evaluación de las pérdidas.
El desafío para las aseguradoras es crear modelos que valoren con precisión los peligros climáticos. Arbol aprovecha la tecnología de la inteligencia artificial para procesar grandes cantidades de datos climáticos y simular interacciones entre diferentes factores climáticos, dice Siddhartha Jha, fundador y director ejecutivo de la startup.
Jha, ex estratega de comercio de materias primas de Citadel, también ha utilizado su experiencia en Wall Street para diseñar una cartera de productos diversa, suscribiendo principalmente seis riesgos relacionados con el clima, incluidas temperaturas, humedad del suelo y radiación solar, y operando en más de 15 países, principalmente en Europa y América del norte. Esa diversidad, según Jha, reduce la exposición al riesgo de la empresa y al mismo tiempo mejora la rentabilidad.
La estrategia parece estar funcionando. Si bien el negocio de Arbol se centra en asegurar contra los peligros climáticos, que han aumentado en frecuencia y gravedad bajo un clima cambiante, Jha dice que la startup de seis años es rentable.
Arbol realizó transacciones por 250 millones de dólares en primas brutas emitidas el año pasado, frente a los dos millones de dólares en 2020, cuando comenzó a ofrecer servicios de seguros paramétricos, según la compañía.
La inversión, anunciada el martes y codirigida por Giant Ventures, con sede en Londres, y la rama de capital de riesgo de la francesa BNP Paribas, se produjo después de que Arbol registrara un aumento de casi el 50 por ciento en los ingresos en 2023 respecto al año anterior. Otros inversores en la nueva ronda incluyen Mubadala Capital, un fondo soberano respaldado por Abu Dabi.
El anuncio de recaudación de fondos es el último de una lista creciente de inversiones en el sector de seguros paramétricos.
En 2022, la aseguradora francesa Descartes Underwriting completó una ronda de 120 millones, mientras que Raincoat, con sede en Puerto Rico, también recaudó millones de dólares entre inversores de riesgo. Floodbase, una corporación de beneficio público de Nueva York, también está trabajando en un piloto de su producto de seguro paramétrico en África.
“El mundo está empezando a darse cuenta de las brechas de cobertura climática” en los seguros, dice Jha. "Eso va a empezar a convertirse en un gran foco de atención".
Si bien las empresas agrícolas, los operadores de infraestructura energética y los clientes de reaseguros (es decir, aseguradoras que compran protección de otras aseguradoras para cubrir su riesgo) constituyen actualmente la mayor parte de la base de usuarios de Arbol, Jha dice que la nueva financiación ayudará a la startup a hacer una incursión hacia otros mercados.
A principios de este mes, Arbol lanzó una filial que comenzó a ofrecer seguros de hogar para comunidades costeras de los Estados Unidos, donde las “aseguradoras de último recurso” respaldadas por el Estado están asumiendo billones de dólares en riesgos.
A medida que aumentan los daños económicos causados por las catástrofes naturales, más compañías de seguros se han retirado de áreas de alto riesgo como California y Florida. Las aseguradoras restantes están aumentando las tarifas en respuesta a las crecientes amenazas inducidas por el clima.
Un análisis reciente predice que la prima promedio del seguro de vivienda en Florida se acercará a los 12.000 dólares para finales de 2024, mientras que el promedio nacional está en camino de alcanzar un récord de 2.522, con un aumento de aproximadamente el 20 por ciento en los últimos dos años.
Si bien el seguro paramétrico tiene limitaciones (cuando un peligro climático no cruza el punto de activación, por ejemplo, los asegurados no recibirán pagos incluso si se produjeron daños), el producto está ganando terreno a la par que las empresas luchan por protegerse de los impactos cada vez más severos del clima.
Los datos de Allied Market Research muestran que, a nivel mundial, los seguros paramétricos crecieron hasta convertirse en un negocio de casi 12.000 millones de dólares en 2021 y se espera que dupliquen su tamaño para 2031.