Coca-Cola y Pepsi darán a conocer este jueves sus resultados del año pasado. Los dos líderes globales del sector de bebidas no alcohólicas consolidaron en 2021 la recuperación de sus cuentas tras la pandemia y mostraron más compromisos con el medio ambiente. Sin embargo, el elevado consumo de plástico es una de sus grandes cuentas pendientes para los ecologistas.

Los analistas esperan que ambas multinacionales continúen la senda de las ganancias que ya fueron experimentando a lo largo del pasado ejercicio después de que la crisis del Covid-19 lastrara su beneficio en 2020.

Una recuperación que ya se ha ido percibiendo en bolsa. En el último año, las acciones de las dos compañías se han disparado más de un 30 por ciento hasta situarse a máximos históricos, por lo que el mercado ya espera que tanto Coca-Cola como Pepsi traduzcan esa subida en ganancias para sus inversores.

Más de 2.000 millones de beneficios trimestrales

Un informe reciente de JP Morgan estima que los beneficios de Coca-Cola superarán los 9.900 millones de dólares en el conjunto de 2021.

Entre enero y septiembre, la compañía ganó más de 7.300 millones, por lo que ahora sumaría otros 2.600 millones más a sus arcas; una cantidad que estaría ligeramente por encima de las ganancias del trimestre anterior.

Cifras similares presentará Pepsi. Los analistas de JP Morgan calculan que cerrará el pasado ejercicio con un beneficio por encima de los 8.600 millones de dólares. En términos trimestrales se traduciría en que Pepsi ganaría unos 2.300 millones, en línea con los datos presentados en el tercer trimestre. 

Será Pepsi quien reporte una mayor ganancia a sus inversores. El beneficio por acción (bpa) será de 1,52 dólares, de acuerdo al consenso de Bloomberg. JP Morgan eleva en un centavo esta cantidad, mientras que la guía ofrecida por la empresa en septiembre apuntaba a ganancias de 1,47 dólares.

Coca-Cola, por su parte, retribuirá a sus accionistas con  0,41 dólares, según coinciden los analistas.

“Creemos que está configurada para un trimestre fuerte ya que nuestras estimaciones y las del consenso contemplan la modesta aceleración del tercer trimestre”, destacan en JP Morgan sobre la multinacional.

“Esperamos que la demanda subyacente de consumidores se mantenga fuerte en el final del año”, apuntan sobre Pepsi.

El consumo de plástico ensombrece su perfil ESG

2021 supuso también la adhesión a la Agenda 2030. Coca-Cola anunció la incorporación de la mayoría de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Pepsi desveló en septiembre una “transformación integral” de su negocio como vía para cumplir con los objetivos de la transición energética.

Los grandes proveedores de rating les conceden altas calificaciones. ISS, el mayor proxy global, les concede una nota de 4 sobre 10, siendo esta la peor nota. MSCI otorga su segunda nota más alta mientras que ambas se elevan hasta los puestos 67 (Pepsi) y 68 en el ránking de S&P Global. En el índice Sustainalytics que realiza Mornignstar, Pepsi se sitúa en un nivel de riesgo ESG bajo y Coca-Cola, en un nivel medio.

Carbon Disclosure Project (CDP), que evalúa la estrategia climática, les concede las calificaciones más altas posibles.

Pese a ello, ambas compañías han estado en el foco por su consumo de plástico. El año pasado repitieron por cuarto año consecutivo como las empresas más contaminantes de plástico, según el informe anual Audit Brand que elabora Breaking From Plastic, una ONG con más de 2.000 organizaciones de todo el mundo adscritas.

En este sentido, Coca-Cola lidera la lista con un balance de casi 3 millones de toneladas de plástico que anualmente van a parar al medio ambiente.

“No es sorprendente ver las mismas grandes marcas como los principales contaminadores. Para combatir el cambio climático, multinacionales como Coca-Cola y Pepsi deben acabar con su adicción a los envases de plástico de un solo uso y alejarse de los combustibles fósiles”, dijo Abigail Aguilar, coordinadora de la campaña de plásticos de Greenpeace y una de las autoras del estudio.