El megabono verde del Reino Unido dejará sin récord al Tesoro español
El Reino Unido prepara la que sería la mayor emisión de un bono verde del mundo -17.400 millones-, poniendo el listón muy alto para la inaugural de España
Reino Unido continúa dando pasos para reforzar su perfil medioambiental tras el Brexit y de cara a la COP 26 que se celebrará en el país este otoño.
Después de introducir el cambio climático como parte del mandato del Banco de Inglaterra o presentar un recorte de emisiones más ambicioso que el de la Unión Europea, ahora prepara la colocación del mayor bono verde del mundo.
El miércoles presentó el marco de financiación verde, y el objetivo sería poner en circulación este ejercicio fiscal un bono por 15.000 millones de libras (17.400 millones); en al menos dos tramos. La primera emisión podría llevarse a cabo en el mes de septiembre.
Si los planes del Reino Unido no se ven modificados, con esta colocación el país que lidera Boris Johnson firmará la colocación récord.
Hasta ahora la medalla de oro la tenía Italia, que puso en circulación una emisión por 8.500 millones, aunque podía haber aspirado a mucho más: su emisión inaugural alcanzó 80.000 millones en demanda.
El récord, inalcanzable en 2021
De acuerdo con las últimas estimaciones adelantadas por el Tesoro español, que apuntan a colocar entre 5.000 y 10.000 millones este año a través de un bono verde, los objetivos adelantados por el Reino Unido complicarían que España pueda realizar ya la emisión récord.
En un principio, el Tesoro -que incluso llegó a valorar una colocación en varios tramos por 15.000 millones- podría haber competido con el Reino Unido por esta medalla.
Si no existen retrasos, el primer bono español debería ver la luz a la vuelta del otoño y se espera que pronto publique su marco de referencia, después de muchos meses de trabajo.
La falta de Presupuestos ha retrasado la emisión de deuda española
El organismo que lidera Carlos San Basilio lleva desarrollando este proyecto un largo periodo de tiempo, porque en el inicio se llegó a fijar 2020 como el año en el que España se estrenaría en el mercado de deuda verde.
Sin embargo, según reconoció San Basilio, la complejidad del marco -donde los fondos deben ir a partidas presupuestarias- y la falta de Presupuestos Generales del Estado retrasaron la colocación.
Además de poder captar nuevos inversores -los bonos verdes son productos muy demandados con los fondos ESG- la emisión abre la puerta a que el Tesoro encuentra financiación a mejor coste.
De acuerdo con Bank of America, entre los principales emisores de bonos verdes de países europeos, la prima de los bonos verdes frente a otros bonos en la curva tiende a ubicarse en el rango de 3 a 8 puntos básicos.