El mundo todavía se encamina hacia niveles catastróficos de calentamiento global, incluso después de una serie de nuevos compromisos climáticos, de acuerdo con un nuevo informe de la ONU.

Si los países no establecen objetivos más estrictos para la reducción de emisiones en el corto plazo, el mundo estará en camino a aumentar su temperatura en 2,7 °C para 2100, según el estudio publicado este lunes antes de la cumbre climática de Glasgow destinada a hacer un balance de las promesas nacionales.

El aumento de temperatura superará con creces el objetivo establecido en el Acuerdo de París de mantener el calentamiento global por debajo de 2 °C y preferiblemente en 1,5 °C.

En el marco de la ONU, todos los signatarios deben indicar lo que están haciendo para reducir sus emisiones para 2030.
El Informe de síntesis de los planes de acción climática nacionales (NDC, por sus siglas en inglés) resume esas reducciones y compara el resultado con el camino que el mundo debería seguir para alcanzar los objetivos de temperatura establecidos en París.

La proyección presentada este lunes se ha mantenido sin cambios desde la última actualización de la ONU presentada en el mes de septiembre.

En un análisis separado, la Agencia Internacional de Energía examinó las promesas hasta 2060. Llegó a la conclusión de que cumplirlas pondría a la Tierra en camino a un calentamiento del 2,1 °C para 2100. Ese cálculo supone que los países reducen emisiones a corto plazo en su camino hacia el logro de las ambiciones a largo plazo.