La batería de medidas en materia de sostenibilidad que ha puesto en marcha la Unión Europea va a tener una derivada nacional. El Gobierno español está desarrollando un Plan Nacional de Finanzas Sostenibles, según ha confirmado este jueves Pablo de Ramón-Laca, director general del Tesoro y Política Financiera del Tesoro Público.

Su finalidad será, precisamente, “adaptarse a los cambios que están por venir desde la Unión Europea”, ha indicado durante una jornada organizada por Observatorio Español de la Financiación Sostenible (Ofiso).

Este Plan está desarrollándose a través de una Comisión Delegada y un grupo de trabajo integrado por diferentes ministerios, básicamente, el de Economía y el de Transición Ecológica. “Es un trabajo conjunto, que necesita coordinación”, ha indicado el director general del Tesoro. 

Además, de esa exigencia de coordinación, dados los cambios normativos que están desarrollándose en el marco europeo, España tiene prevista para este año su primera emisión de bonos verdes, como ya adelantó SOCIAL INVESTOR.

En este sentido, Pablo de Ramón-Laca, ha recalcado que no será un movimiento circunstancial, para aprovechar el despegue de la financiación sostenible, sino que será un “programa de bonos ver soberanos” y constituirá un “componente estructural de la política del Tesoro”.

La ‘triple finalidad’ del primer bono verde español

En esta misma jornada, Alvaro López Barceló, subdirector general de Gestión de la Deuda Pública del Tesoro Público, ha ahondado en que el primer bono verde español tendrá una triple finalidad.

Por un lado, permitirá financiar la descarbonización. Por otro, contribuir a una curva verde de emisiones del Tesoro. Y, por último, diversificar la base inversora de la deuda soberana española, con inversores enfocados en la sostenibilidad.

Y, aunque no esté en esos tres principales objetivos, Alvaro López Barceló también ha apuntado que entre las metas del Tesoro está reducir los costes de financiación.

Además, esa futura emisión del primer bono verde español constituye, para el Tesoro, “una oportunidad para visibilizar una agenda medioambiental como país” y un “catalizador para ahondar en la transición ecológica, tanto por parte del sector público como privado”.

“No será una emisión puntual, los bonos verdes van a ser un componente sustancial de la política de financiación del Tesoro en los años venideros”, ha recalcado López Barceló.

En esa misma jornada de Ofiso, Rodrigo Robledo, director general de Política Financiera y Tesorería de la Comunidad de Madrid ha aterrizado la estrategia de emisiones ESG en el ámbito de las Comunidades Autónomas. En su caso, ha instado a un mayor enfoque de emisiones desde la perspectiva social de la ESG y no sólo medioambiental y ha instado al Tesoro a avanzar en ese sentido.

En el caso de la autonomía madrileña, en 2020 realizó una emisión social ligada a la crisis sanitaria provocada por el Covid-19, por valor de 52 millones de euros. En total, en el último ejercicio, Madrid ha realizado operaciones en bonos sostenibles por un importe global superior a los 1.500 millones.