La reacción violenta contra las estrategias de inversión que tienen en cuenta la ESG aumenta en los EEUU. Ello crea un efecto contagio sobre la industria que ya impacta en los fondos de manera global, según HSBC.

Y afecta la manera en que los gestores piensan sobre la integración de tales consideraciones en sus fondos, según una encuesta realizada por HSBC Holdings.

El banco con sede en Londres encuestó a 310 profesionales de todo el mundo sobre la toma de decisiones ESG desde finales de mayo hasta el 24 de junio.

Los encuestados representaron 8.900 millones en activos bajo administración en 292 instituciones, escribió el equipo de investigación global de HSBC, dirigido por Wai-Shin Chan y Anushua Chowdhury, en una nota publicada este mes.

"Sin duda, hay un aumento en el sentimiento anti-ESG en los Estados Unidos", escribieron los analistas. "Desde nuestro punto de vista, esto cae principalmente en líneas políticas y está aislado de los EEUU".

Los efectos del retroceso son evidentes en los EEUU. Por ejemplo, en América del Norte, ha habido una disminución en quienes dicen que la sostenibilidad es un objetivo del fondo.

Casi una cuarta parte de los encuestados en América del Norte dijo que la sostenibilidad es un objetivo principal o secundario, frente al 37 por ciento del año pasado.

Un artículo de Caleb Mutua y Tim Quinson