El juez Manuel García-Castellón archivó este jueves la causa contra el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, en el caso Villarejo.

El magistrado atiende la petición que volvió a solicitar el pasado viernes Sánchez Galán para desestimar las acusaciones de espionaje. El presidente de la eléctrica había sido investigado por delitos de cohecho activo, contra la intimidad y de falsedad en el documento mercantil.

García-Castellón sí mantiene abierta la pieza del 17 del caso Tándem, en el que se investiga la vinculación de la empresa Cenyt del excomisario de la Policía Nacional, José Manuel Villarejo, y sus contratos con Iberdrola.

La causa contra la cúpula, archivada

Según apunta el juez en el auto, la presunta participación del presidente de Iberdrola en los hechos que se investigan comprendería un periodo “que llegaría hasta el año 2009”. Galán fue imputado en 2021, por lo que el plazo de prescripción de diez años se ha superado.

“No cabría opción más que declarar la presencia de esta circunstancia extintiva de la responsabilidad y, con ello, decretar el sobreseimiento libre” para el directivo, concluye el juz García-Castellón.

El juez ha sobreseído, de la misma forma, la imputación de otros de los altos directivos de Iberdrola imputados en el caso Villarejo: el exjefe de gabinete de Sánchez Galán, Rafael Orbegozo, y el que fuera número 2 de Iberdrola, José Luis San Pedro. 

Se archiva también la causa contra el exdirector de Administración, Juan Carlos Rebollo.

División entre los proxy

La resolución judicial llega apenas una semana después de que Iberdrola celebrase su junta de accionistas. En la cita, el caso Villarejo estaba llamado a ocupar una posición importante en el orden del día por la reelección de consejeros.

Las 20 propuestas recogidas para la asamblea fueron aprobadas. Solo una, la referente al informe de remuneraciones del consejo, obtuvo un rechazo de casi el 25 por ciento que se recibió como un porcentaje de castigo significativo.

La cita ante los accionistas propició desavenencias entre los proxy advisors. Corporance, el asesor de voto español integrado en la red Proxinvest, recomendó votar en contra de la gestión de Iberdrola el año pasado, al no haber establecido un plan de sucesión ante su imputación.

Norges Bank, propietario del 3,36 por ciento del capital de Iberdrola, había recomendado votar a favor de todos los puntos presentados por la eléctrica. Al igual que ISS y Glass Lewis, dos de los mayores asesores de voto del mundo, que descartaron que fuese el momento para “castigar” a la compañía.