Las grietas en la ESG que destapó la quiebra de Silicon Valley Bank 

La sostenibilidad fue culpada (sin razón) de la quiebra de Silicon Valley Bank. Aun así, lo cierto es que muchos gestores ESG invirtieron en el banco sin advertir de sus riesgos. ¿Qué pasó de verdad?

Dos meses y medio después de la quiebra de Silicon Valley Bank y una vez superado el susto (el efecto contagio se ha evitado) toca hacer balance de lo que realmente ocurrió con el banco estadounidense y sus implicaciones sobre la industria ESG. 

Según explica Francisco Cortés, profesor del Doble Grado en ADE y Finanzas de la Facultad de Empresa de la UNIR, se equivocan los que han relacionado la quiebra del banco con el hecho de fuera una entidad preocupada por los factores ESG. 

“Son grupos interesados que intentan decir que todo lo que está relacionado con la ESG es malo”, que entienden “que la ESG es una carga para las empresas y que puede ser un problema para su viabilidad”, apunta el profesor en el último podcast de Social Investor. 

Pero lo ocurrido con Silicon Valley Bank nada tiene que ver con el hecho de que se dedicara más a la ESG que a la gestión de los riesgos, como han denunciado estos grupos “de un ámbito ideológico determinado” relacionado con el ala más conservadora del Partido Republicano estadounidense. 

Una quiebra de libro

Más bien al contrario, "el caso de SVB es una quiebra de libro, en el sentido de que no gestionó bien el riesgo de mercado, que es un riesgo habitual en el ámbito de la banca”. 

En concreto, Silicon Valley Bank tenía "un exceso de liquidez, porque las sociedades de capital riesgo estaban acumulando recursos para invertir en las sociedades tecnológicas”.  

Por eso, la entidad decidió invertir ese exceso de liquidez “desproporcionado” en los mercados de capitales y, en concreto, en bonos.  

“Y todos sabemos que, cuando hay un cambio en la política monetaria, hay una depreciación. Es una cosa que se estudia en primer año de Empresas o de Finanzas, que el precio de los bonos se devalúa cuando suben los tipos. ¿Qué pasó? Que coincidió con un intento de ampliación de capital fallido y, ante el fallo de la ampliación de capital, hubo una retirada de depósitos y, entonces, el agujero no se pudo cubrir”, explica Cortés.  

“Pero, básicamente, fue un problema de diseño de una cartera. No hay que olvidar que los recursos de depósito de los bancos tienen que dedicarse a lo que es la intermediación financiera: generar préstamos y financiación para las empresas. No invertirlo en el mercado de capitales. El riesgo de mercado, que es lo que ha ocurrido en Silicon Valley Bank, que es el riesgo de depreciación de sus activos, es algo que se tiene que medir y que se tiene que anticipar. Que sea una entidad que se haya preocupado de los criterios ASG es una anécdota, porque no es el motivo de la quiebra”, insiste el profesor. 

Los gestores ESG no advirtieron del riesgo en Silicon Valley Bank

En cambio, Cortés sí ve una cierta mala praxis en los gestores de fondos sostenibles que invirtieron en SVB. Que no fueron pocos, según datos de Morningstar: el 3,3 por ciento de los fondos artículo 9 según la SFDR y el 2,6 por ciento de los fondos artículo 8. 

“A poco que cualquier persona hubiera analizado el balance de SVB y hubiera visto cómo habían crecido los depósitos tan desproporcionadamente y cómo la entidad había reaccionado comprando activos del mercado de capitales, se hubiera dado cuenta de que un cambio en la política monetaria iba a provocar un agujero enorme”, considera Cortés. 

Pero el problema en este caso es que los gestores de fondos ESG prestaron más atención a los factores de sostenibilidad que a los financieros. 

“El problema que tienen las instituciones de inversión colectiva es que tienen que buscar cada vez más activos elegibles. Es decir, empresas que reúnan requisitos de carácter ambiental, social y de gobernanza. Y no todas las empresas cumplen esos requisitos. En el caso de SBV, los cumplía", relata Cortés. 

Por todo ello, el experto concluye: “No podemos centrarnos exclusivamente en el desempeño de la gestión del riesgo económico financiero y obviar lo social y lo ambiental, porque está en el marco regulatorio, en las expectativas políticas, los parlamentos y la sociedad. Eso está ahí y es incuestionable. Pero tampoco podemos obviar la parte económico-financiera”. 

Capítulos del podcast: 

  • 01:01 - Silicon Valley Bank, una cuestión de riesgos financieros 
  • 06:21 - Un error de los gestores ESG 
  • 09:12 - Regulación 
  • 12:37 - Movimiento anti ESG 

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