Texas continúa estrechando el cerco sobre Blackrock, State Street y Vanguard. El estado republicano ha abierto una investigación para dilucidar si los grandes inversores institucionales están discriminando a la industria del gas y del petróleo.

Los senadores republicanos quieren solicitar pruebas y hacer declarar a los responsables de estas firmas y que valoren el impacto que podría tener para el ahorro público.

Aunque no habría trascendido exactamente lo que se solicitará, es un paso más en la contienda abierta hace unos meses por este estado, muy expuesto a la actividad de la industria petrolífera.

Texas las estaría investigando ante el posible daño financiero de sus prácticas.

La tensión entre los republicanos y Wall Street ha ido a más en los últimos meses, no solo por su enfoque a favor de la lucha contra el cambio climático, sino también por su actitud tras la ilegalización del aborto en Estados Unidos.

Varios pesos pesados de la industria dieron el paso y anunciaron que cubrirían los gastos de traslado de aquellas empleadas que se vieran obligadas a viajar para poder ejercer su derecho al aborto en un estado en el que fuera legal.

“Están usando su influencia para empujar a esas empresas a la izquierda”, señaló en una entrevista el senador republicano en una entrevista recogida por Bloomberg. “Y eso no es bueno para los accionistas·, insistió.

En su lucha, los republicanos también están incluyendo a ISS, el mayor asesor de voto del mundo, al que también le acusan de influir en las votaciones.