Ocho de cada 10 bancos incluyen la ESG en el análisis de riesgo de crédito
Las entidades esperan que los proveedores externos de datos y los informes públicos corporativos regulados sean sus principales fuentes de información para valorar este tipo de riesgos
La EBA ha dado a conocer este lunes su 'risk dashboard' trimestral en el que ha incluido los resultados de la edición de otoño del Risk Assessment Questionnaire (RAQ). En el análisis participan 131 bancos, que representan alrededor de un 80 por ciento de los activos financieros dentro de la Unión Europea.
El cuestionario sobre evaluación de riesgos (RAQ), entre otros puntos, ofrece visibilidad sobre cómo el sector financiero incluyendo la ESG en su política de gestión de los mismos.
De acuerdo con la EBA, ocho de cada diez entidades ya afirman que los tienen en cuenta en el riesgo de crédito, mientras que siete de cada diez los clasifica dentro de la categoría de riesgos reputacionales u operacionales.
Según recoge el regulador europeo, las métricas que los bancos utilizan más habitualmente para medir su exposición a los riesgos climáticos, son las emisiones de gases de efecto invernadero (GHC), los ratings medioambientales (en ambos casos para un 45 por ciento de las entidades).
Otros indicadores son la exposición concreta a activos verdes o a actividades dañinas contra el medio ambiente.
Los proveedores externos, claves en el futuro inmediato
Las entidades financieras también revelan en la encuesta de otoño cuáles creen que van a ser a corto plazo sus fuentes de datos más relevantes para medir y poder seguir la pista a la evolución de los riesgos ESG (véase gráfico).
Las fuentes de datos externas y la información no financiera y la futura Directiva de información sobre sostenibilidad corporativa son las fuentes que la banca, a corto plazo, considera de máxima prioridad.
Una de las dificultades que están encontrando los bancos es cómo obtener datos de todos sus clientes que sean comparables, y ven en la reforma de la directiva en la que trabaja la Unión Europea un buen punto de partida para obtener datos con los que establecer el riesgo ESG de sus clientes de forma homogénea y regulada.
No obstante, por el momento, los bancos están desarrollando sus propios modelos; por ejemplo para pymes. En teoría, excepto las empresas que coticen en bolsa, estos nuevos informes sobre información sostenible no serán obligatorios para el resto de las compañías, pero los bancos sí que necesitarán información ESG para poder valorar a toda su cartera de clientes.
De hecho, hoy por hoy, la banca sigue utilizando mayoritariamente sus propios modelos internos para evaluar su riesgo ESG, en un entorno en el que todavía es muy complejo poder homogeneizar y con la regulación a medio terminar.
De acuerdo con los datos publicados este lunes por la EBA, más de la mitad de las entidades financieras estarían recurriendo a sus propios 'rating' para medir el riesgo de su exposición.