La COP29 y la debida diligencia sitúan en el epicentro de la ESG española al Foro Social Investor

El Foro Social Investor de la revista Inversión firma sus mayores registros de participación. La "nueva ESG" centra los cuatro grandes debates

Isabel Abellán, de Banc Sabadell, Severiano Solana, de CaixaBank, Marco Masip, de Telefónica, y Nuria Rodríguez, de Naturgy, junto con el director de la revista Inversión, Alejandro Ramírez, protagonizaron un intenso debate sobre cómo conjugar ESG con rentabilidad.

La revista Inversión congregó el jueves a un centenar de profesionales de la ESG en el Foro Social Investor. Los asistentes se repartieron durante la mañana entre los cuatro debates de primer nivel planteados. El título ‘Nueva ESG: cambios y oportunidades’ amparó un programa que contó con el impacto de la COP29 en estos criterios y con la llegada de la diligencia debida a las pymes españolas como claves de bóveda de la cita.

Empresas líderes en sostenibilidad (Banc SabadellCaixaBankNaturgy, Fundación Telefónica y PwC) se unieron la revista Inversión para impulsar esta convocatoria del Foro Social Investor. Éste rompió el récord de inscripción a una semana de su celebración, superando de largo los registros de audiencia previos a la pandemia de Covid-19 y elevando en un 14% la cifra de asistentes registrada en la edición de 2023.

Con las cifras en la mano, el Foro Social Investor es el mayor en ESG que organiza un medio de comunicación español. No en vano, la revista Inversión fue pionera en cónclaves especializados en las finanzas y criterios responsable al incluirlos ya en 2016 en su programación regular de foros presenciales.

La edición de 2024 arrancó con Adriana Rodríguez, investigadora en Climate Strategy & Partners, y Ana Belén Sánchez, directora en Alinnea Climate Action Tank. Ambas fueron ponentes en varias reuniones de la COP29. Su testigo de primera mano sirvió, con la moderación de Ismael García Villarejo, para comprender cuál es el impacto de las decisiones tomadas en la cumbre del clima sobre la ESG y, por tanto, sobre las empresas españolas.

Para Rodríguez, “los 300.000 millones de dólares de financiación climática (acordados en la COP29) son una señal hacia el mercado de que esto está continuando, es el futuro y no hay marcha atrás”. “Aun teniendo una situación geopolítica complicada hemos llegado a un acuerdo de financiación climática. La arquitectura climática sigue formándose y seguimos avanzando en financiación”.

Para Sánchez, que estos acuerdos supranacionales sigan avanzando es estrictamente necesario. “Estamos en una situación de mucho peligro y lo acabamos de ver en Valencia. Eso que hemos visto allí nos va a pasar cada 3-4 años”. La ponente señaló que hay empresas que tienen grandes riesgos porque algunos activos están en espacios vulnerables por el cambio climático.

“La ESG te está pidiendo que lo mires, lo analices. Eso no depende de Bakú ni de nada. Es algo que las empresas tienen que estar trabajando hoy”.

Diligencia debida y cuenta de resultados

Los editores del Foro Social Investor decidieron incluir en la programación de este año un panel formado por líderes de la diligencia debida. Europa vuelve a señalar el camino hacia la sostenibilidad con la aprobación de la directiva sobre diligencia debida de las empresas, que afectará, a partir de 2027, a las firmas con más de 1.000 profesionales en plantilla y una facturación superior a los 450 millones de euros.

Joaquín Guerola, de PwC, María Lledó, de Acento, Borja Miranda, de Sodali & Co, y la periodista de Inversión María Gómez Silva se encargaron de despejar las incógnitas de los asistentes. ¿Cuáles son las principales obligaciones?, ¿cómo afectará a las escalas salariales?, pero, sobre todo, ¿cómo impactará a la cuenta de resultados? fueron las dudas principales que se propusieron desde el auditorio de la Fundación Telefónica a estos speakers de primer nivel.

Guerola defendió el despliegue del conjunto de normas que constituyen la debida diligencia porque los beneficios no se pueden obtener perjudicando a la gente ni al planeta. Continuó defendiendo que “las cadenas de valor son cada más complejas, más supranacionales... y, por ejemplo, los riesgos sociales (en referencia a los derechos humanos) no están aquí. No tendría sentido una directiva que solo se dedicara a la cadena de valor en Europa”.

Lledó agregó durante el debate que la diligencia debida “va a garantizar unos derechos laborales básicos en toda la cadena de suministro”. En su opinión, tres son los aspectos que aportará esta directiva: “El beneficio reputacional, la autonomía estratégica y Europa como líder desarrollando competitividad”.

El punto más descriptivo lo aportó Miranda. Según su análisis, “las compañías europeas se convertirán en 'policías' de sus proveedores“. El directivo de Sodali & Co recomendó, sin embargo, a las empresas españolas “empezar a alinear a toda la organización“ en debida diligencia. “Es un buen momento para preparar el ADN de las compañías“ para llegar con más garantías al 2027.

¿Se puede seguir el ritmo de la nueva ESG?

El Foro Social Investor se ocupó de más novedades. El 1 de enero de 2025 arranca un trienio trascendental para el despliegue de las nuevas normas de la ESG. El grueso de los calendarios regulatorios está en revisión (siendo el de las emisiones el de mayor impacto) mientras el flanco de la S, hasta ahora en un plano subyugado a la E y la G, pide paso.

Todo señala un camino difícil: las empresas y los inversores están ante un complejo cambio cultural y frente a una transformación inédita en la gestión, que afecta a las organizaciones en su totalidad y se extenderá a la cadena de suministro. Y a pesar de las prórrogas de los legisladores, el plazo para adaptarse será muy corto en términos empresariales.

Isabel Abellán, de Banc Sabadell, Severiano Solana, de CaixaBank, Marco Masip, de Telefónica, y Nuria Rodríguez, de Naturgy, junto con el director de la revista Inversión, Alejandro Ramírez, protagonizaron un intenso debate sobre cómo conjugar ESG con rentabilidad.

Abellán fue la más crítica con el escenario actual, creado por Bruselas: “La regulación lo que tendría que hacer es ser útil y facilitar y dar acceso a los mercados... No traer más burocracia”, insistió. Solana coincidió con su colega de sector: “Hemos recibido una cantidad de normativa difícilmente digerible”. “Pero es la manera -matizó- en la que posiblemente logremos avanzar a mayor velocidad”.

El representante de Telefónica, Masip, también cogió el guante: “Las normas siguen a un entendimiento social medianamente sólido y tengo muchas dudas de que estemos en esa situación. Cuando una norma se anticipa demasiado en determinados aspectos, genera distorsión”. 

Rodríguez, que representa a una de las empresas pioneras en sostenibilidad en España, reconoció que los tiempos de espera son holgados: “Vamos a tardar en ver los beneficios de esta regulación, desde el punto de vista de tener información homogénea y que sirva de palanca de cambio”. 

Esta mesa calentó motores con un panel previo: lo protagonizaron Claudia Antuña (AFI) y Jaime Silos (Forética). Ambos analizaron el impacto de la ESG en la competitividad de las empresas españolas. Antuña insistió en “la normativa europea es enormemente compleja. Hay que encontrar la manera de simplificar y acercar ese marco complejo a la realidad de las empresas”.

Ambos recomendaron a los empresarios asistentes al Foro Social Investor una integración 360 de la sostenibilidad en sus negocios. Silo les remarcó que “el mercado paga un 26% más por una empresa sostenible que por una que no lo es, a igualdad de beneficios”.

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