La agitación de agosto en los mercados financieros ha dejado a los estrategas tranquilos sobre las perspectivas para las bolsas europeas, que se espera que alcancen nuevos máximos este año. El Stoxx Europe 600 se prevé que cierre el año en 535 puntos, aproximadamente un 4,6% por encima del cierre del viernes, según la estimación de una encuesta de Inversión a 16 estrategas. Eso implicaría superar el récord alcanzado en mayo.

Las bolsas europeas se recuperaron rápidamente de las pérdidas a medida que los mercados globales hacían lo propio tras la volatilidad salvaje de principios de agosto. Los datos económicos mixtos y una dramática recuperación de las operaciones no fueron suficiente para descarrilar el repunte de manera duradera. Los inversores cuentan con recortes de los tipos de interés para respaldar las valoraciones de las acciones. Mientras tanto, la temporada de resultados fue tranquilizadora y mantuvo a los estrategas relativamente optimistas.