La metamorfosis de la gran ciudad
El éxodo urbano tras la crisis del coronavirus ha sido menor de lo esperado pero la transformación de las grandes ciudades es una realidad imparable
Javier Laporta es el tipo de persona que hasta hace poco elegía vivir en el centro de Madrid. Cultivado, inquieto y profesional liberal, estaba encantado con la diversidad de planes de ocio que ofrece la capital y dispuesto a pasar por alto sus muchos inconvenientes (ruido, contaminación, etc.) hasta que la pandemia supuso un punto y aparte en sus preferencias.
Decidió escuchar los argumentos de su pareja y terminaron comprando un piso en una urbanización de Pozuelo de Alarcón (a 12 kilómetros de la capital), con piscina y zonas ajardinadas comunes. «Cuando tienes que pasar mucho tiempo en casa, se te queda pequeña. Y la idea de que el teletrabajo pueda quedarse de manera mixta te obliga a pensar en tener algo de espacio para trabajar. A mí me ha tocado hacer muchas reuniones en el cuarto de mis hijas o en la cocina», explica.