Recetas para salvar la economía

Los planes de Mario Draghi para Italia ponen en aprietos a otros líderes europeos. Tiempo de escucha: 2 minutos

Podcast de la revista Inversión

El director de la revista Inversión, Alejandro Ramírez, plantea sus obsesiones editoriales junto a los expertos del semanario y las fuentes más solventes del sector. Episodios disponibles las tardes de lunes a viernes, tras el cierre de los mercados europeos. 

Transcripción

Hola a todos. Soy Alejandro Ramírez y estas son las obsesiones de la revista Inversión al cierre de los mercados europeos. Hoy es jueves 18 de febrero.

Los planes de Mario Draghi como primer ministro italiano para reconstruir la economía de su país despiertan una ola de entusiasmo.

Sorprende ver a un líder hablar con esa seguridad y solvencia capaz de convencer a todo el arco político. Si salvó al euro en un momento crítico pocos dudan de que pueda salvar a Italia de la compleja situación en que se encuentra.

La diferencia de Draghi con otros presidentes de Gobierno es que él no tiene que acudir a las urnas, no está hipotecado por eso. Así tiene claro el destino que dará a los miles de millones que llegarán de ayuda europea.

Los destinará a proyectos a largo plazo que sirvan para crear un nuevo modelo económico y para acometer reformas estructurales ambiciosas (fiscal, educación, administración pública, mercado laboral...).

No tiene la tentación de regar con ese dinero a sus amigos, con vistas a una reelección.

Lo positivo de esto es que sus iniciativas ahora se compararán con lo que hagan el resto de líderes europeos, especialmente Pedro Sanchez, por lo que es muy posible que tengan que dar un cambio de rumbo para no salir malparados en las comparaciones.

Quien ha vuelto a salir malparado hoy ha sido el IBEX 35, que ha caído un 0,80 por ciento y se acerca de manera peligrosa a los 8.000 puntos.

La fiebre desatada por la salida a bolsa de la filial de renovables de Acciona, que ha subido más de un 11 por ciento no ha sido suficiente para sostener al índice. La cotización en negativo de Wall Street le ha pasado factura.

Saludos.

En portada