Pensiones. Sánchez ignora los avisos de la OCDE
La revista INVERSIÓN detalla las propuestas de la OCDE para lograr la sostenibilidad del sistema público de pensiones en España. El FMI también insiste en las reformas
Las recetas de la OCDE para conseguir que el sistema público de pensiones sea sostenible son muy claras, describe la revista INVERSIÓN en su número de esta semana: incrementar los ingresos, reducir las prestaciones y aumentar la edad de jubilación.
Si no se consigue, habría que estudiar otras alternativas como financiar las pensiones a través de impuestos o vincularlas a la esperanza de vida.
Pero el semanario de Grupo ED -editor de finanzas.com- explica que, de momento, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez (PSOE), ignora estas advertencias.
De hecho, una de sus primeras medidas ha sido subir las pensiones el 0,9% a partir de este año y se ha fijado como propósito “absolutamente prioritario” actualizarlas con el incremento del IPC.
INVERSIÓN informa de que los expertos de la OCDE lamentan que desde el 2017 ha habido países que han revertido reformas tendentes a dotar de continuidad a los sistemas de pensiones, entre ellos España, que retrasó la aplicación del factor de sostenibilidad hasta el 2023 cuando tenía prevista su entrada en vigor en el 2019.
Desde este organismo internacional también destacan que en España la edad de jubilación "es baja" si se compara con la de otros países. En enero se sitúo en los 65 años y 10 meses. Se irá elevando hasta llegar a los 67 años en el 2027.
Los grandes perjudicados
La OCDE pone el dedo en la llaga cuando se detiene en la problemática de las pensiones en el caso de los trabajadores no convencionales como autónomos, empleados a tiempo parcial y trabajadores temporales porque son los que cobrarán las pensiones más bajas si no se toman medidas correctoras.
Entre ellas, el organismo internacional propone “hacer más atractiva para los autónomos una mayor contribución a la Seguridad Social y recibir así mayores pensiones”, explica en el reportaje del semanario económico el jefe de la unidad de pensiones privadas de la división de asuntos financieros de la OCDE, Pablo Antolín.
Según la información, con los mismos ingresos, los autónomos españoles pagan cotizaciones más bajas que los trabajadores por cuenta ajena, por lo que su pensión será “un 20% inferior”.
En el caso de los trabajadores no convencionales la situación ha empeorado. Trabajar menos horas o en periodos de tiempo reducidos provoca que el salario sea menor y limite, a su vez, el acceso a diferentes vías de ahorro que complementen la futura pensión, como los planes de pensiones.
Los trabajadores temporales tienen menor acceso a los planes de pensiones de empleo que, en general, exigen una antigüedad mínima de dos años en la compañía para participar de ellos. Demasiados no cumplen el requisito.
Para mitigar las disparidades, la OCDE aconseja mejoras en términos de cobertura, contribuciones y derechos, lo que garantizaría una protección más justa en la jubilación, según las fuentes de la revista INVERSIÓN.
El Pacto de Toledo, ¿para cuando?
Al Gobierno Sánchez se le presenta un ingente trabajo en su recién estrenada legislatura en relación con las pensiones.
Pero la asignatura más importante a superar es que la comisión parlamentaria del Pacto de Toledo se olvide de partidismos y llegue a acuerdos para negociar una reforma del sistema público español de pensiones que garantice su viabilidad.
La OCDE insiste en que “en España queda mucho por hacer sobre pensiones”.
El FMI también pide reformas a Sánchez
La ‘reprimenda’ de la OCDE al Gobierno español, plasmada en las páginas la revista económica INVERSIÓN, no es la única. El Fondo Monetario Internacional (FMI) acusa a Sánchez de ser “demasiado generoso”.
En opinión de la institución que preside Kristalina Georgieva se subestima el efecto del envejecimiento de la población española. Las últimas decisiones del presidente Sánchez benefician a los actuales jubilados, argumenta el FMI, pero perjudican a los trabajadores jóvenes y de ingresos reducidos.
Ello, según los expertos del FMI, pone en peligro la continuidad del sistema público de pensiones en España.
La situación se agravaría si no se toman medidas adicionales, “como aplazar la edad de jubilación, aumentar la dotación de la Seguridad Social sin incrementar las actuales cotizaciones y favorecer el desarrollo de planes privados”.
