Codere refleja en sus cuentas la parálisis deportiva y el efecto divisa en América Latina
Codere refleja en sus cuentas trimestrales la suspensión de los eventos deportivos y el efecto divisa en América Latina al perder un 1.000% de enero a marzo
Codere es un reflejo de la parálisis deportiva por el Covid-19 y el efecto divisa de América Latina. Esta combinación provocó que de enero a marzo la casa de apuestas perdiese un 1.000%, 97,1 millones de euros de números rojos frente a los 8,6 millones de 2019.
La suspensión de las competiciones cualquier disciplina por todo el mundo se tradujo en una reducción de ingresos del 21,3%, hasta los 278,5 millones de euros, provocado también por el cierre de sus locales a causa del confinamiento.
El ebitda cayó un 41,1% hasta los 47,7 millones de euros
Codere cerró su negocio presencial el 8 de marzo y su actividad se redujo al negocio online que creció un 7,6% en los tres primeros meses del año. Un crecimiento discreto puesto que pese a mantener este tipo de modalidad, las competiciones estaban suspendida.
También se redujeron las inversiones respecto al mismo periodo del curso anterior hasta los 13,8 millones de euros, un 15,9% menos.
Exposición a América Latina
Mientras algunos locales en España comienzan a reabrir y se espera una vuelta de las competiciones a inicios de junio, como ya sucede en Alemania o Uruguay, la compañía sigue mostrando serios problemas en América Latina.
El coronavirus continúa en plena expansión en la región y a la espera de alcanzar aún el pico de contagios. Por tanto, es previsible que Codere siga sufriendo en Latinoamérica, clave en el negocio del grupo.
La fuerte exposición de Codere a países como México no solo le causó problemas en el trimestre por el freno a los deportes, sino por la apreciación del billete verde, como comúnmente se conoce al dólar, sobre las divisas latinoamericanas.
El dólar llegó a marcar máximos históricos contra 15 de sus principales pares en diferentes momentos del primer trimestre.
Los inversores apostaron por esta moneda como activo refugio en los momentos más críticos del coronavirus y la moneda estadounidense contaba con mayor músculo que otros refugios clásicos como el oro.
El daño tuvo especial relevancia en México, Argentina y Brasil. Al poseer estos países unas monedas con mucha dependencia de las materias primas de debilitaron al hundirse el precio de estas, sobre todo del petróleo, y se sumó además la propia fortaleza del dólar.
A vueltas con la deuda
Además de poco crecimiento de beneficios en los últimos tiempos, la casa de apuesta se enfrenta a serios problemas de liquidez y deuda que ponen en tela de juicio la continuidad de su negocio.
Por ello, se vio obligada a poner en marcha un plan de contingencia para esta tarea que pasa por la reducción de caja, negociaciones con los bonistas, búsqueda de refinanciación con la banca y aumento de la liquidez.
Bien es cierto que redujo sus gastos operativos un 56,5% y a mitad de marzo recibió un préstamo de 20 millones de euros en México con vencimiento en 2025. Aún queda mucho por hacer, pero ya se aprecian algunos progresos.
Actualmente, la caja de Codere es de 121 millones de euros que bajará a 83 tras el pago de un cupón el 30 de mayo
A cierre de trimestre contaba con 150,1 millones de euros de tesoreria, con lo que podría pagar el cupón que había concluido en abril y que se encuentra en periodo de gracia.
Además, busca aumentar su liquidez y conseguir 105 millones de euros para hacer frente al impacto del Covid-19 hasta que vuelva a funcionar al completo su negocio con la vuelta de las competiciones.
La situación de los bonos
Codere tuvo que aplazar sus bonos senior garantizados hasta el 30 de mayo, el mencionado periodo de gracia. En principio, con el volumen de liquidez y tesorería podría hacerlos frente, aunque quizá solo en parte
El total asciende a 500 millones de euros con un cupón del 6,75% y 300 millones de dólares con uno del 7,625%.