Adidas se queda sin gasolina tras un rally espectacular
La estrella del DAX, con una revalorización que supera el 30 por ciento en lo que va de 2016, podría tener agotado su potencial pese a haber presentado recientemente los mejores resultados trimestrales de los últimos diez años.
Adidas es la estrella de la bolsa alemana (y europea) en lo que va de año, al ser el valor del DAX que más ha subido y el segundo más alcista dentro del Euro Stoxx (tras Arcelor Mittal, al calor de la recuperación de las materias primas). Desde que en enero llegase a cotizar a 82,51 euros, la marca de material deportivo ha seguido una vertiginosa tendencia creciente hasta situarse en torno a los actuales 119 euros, lo que supone una revalorización que supera el 44 por ciento y le sitúa en máximos históricos.
Entre los principales motivos para este buen comportamiento está el cambio de consejero delegado, según explica Javier Galán, gestor del fondo Renta 4 Valor Europa (uno de los pocos productos españoles que tiene Adidas en cartera). Kasper Rorsted lidera los destinos de Adidas desde el pasado enero, procedente de la compañía también alemana Henkel, y el mercado tiene puestas sus esperanzas en él. «Henkel consiguió obtener mucha más rentabilidad durante los años que estuvo liderando la compañía. Por eso, el mercado considera que el nuevo consejero delegado va a poner la compañía en márgenes de rentabilidad muy superiores a los actuales», asevera Galán.
De hecho, la compañía ya ha mejorado sus perspectivas de beneficios e ingresos para este 2016, según relata Victoria Torre, de Self Bank. En concreto, Adidas espera que los ingresos crezcan un 15 por ciento este año (frente a la revisión anterior del 10-12 por ciento) y augura que el beneficio neto se incrementará un 15-18 por ciento (frente al 10-12 por ciento anterior).
La cuestión es que este incremento de las previsiones se produce en un escenario ya de por sí benigno para la empresa, tras los buenísimos resultados que la firma publicó en el primer trimestre de este año, que batieron el resultado anterior y también las expectativas del consenso de los analistas. Y es que la afición por el running, el fútbol y el deporte crece en todo el mundo, según recuerdan los expertos.
«Adidas va a tener complicado lograr un trimestre mejor que el primero de 2016, con todas las regiones excepto Rusia arrojando crecimientos de doble dígito en los ingresos, lo que ha provocado un crecimiento orgánico del 22 por ciento», destaca un informe de Barclays. (Precisamente tras conocer estas cuentas, Barclays elevó un 14 por ciento su precio objetivo de Adidas hasta los 120 euros, al destacar «el abultado libro de pedidos que tiene la empresa en la antesala de la Eurocopa y los Juegos Olímpicos», dice el documento).
Sin embargo, este excepcional comportamiento de Adidas es también su principal punto en contra pues la mayoría de los analistas del consenso de Bloomberg ve escaso potencial en el valor a estos precios (de hecho, le da un potencial negativo del 1,5 por ciento). «Aunque Adidas haya presentado buenos resultados empresariales y algunos cambios estratégicos que valoramos positivamente (como el cierre de determinadas tiendas en Estados Unidos y Alemania o el abandono de la gama de golf) ya que permitirá a la compañía centrarse en su core business (el calzado deportivo) nuestro precio objetivo (que hemos elevado recientemente hasta los 81 euros) sigue muy por debajo de su cotización. El valor nos parece caro a estos niveles», relata Fernando Luque, de Morningstar, en una opinión que comparten los analistas del banco de inversión Citi Bank, que está «neutral» sobre la compañía.
Sin embargo, también hay quien piensa que, si bien la compañía está cara, sigue siendo una interesante apuesta a largo plazo. Javier Galán, por ejemplo, explica que no vende su posición en la compañía porque opina que «podría subir aún más» si finalmente la nueva dirección logra mejorar los márgenes.
Por su parte, Antonio Magaz, gestor de Aspain 11 (otra de las compañías con posiciones en el valor), relata que el consenso del mercado ya consideraba que Adidas había agotado su potencial hace meses y, pese a ello, ha seguido subiendo.
«El consenso va con retraso con respecto a la acción. Cada tres meses sube el precio objetivo para situarlo al lado de la cotización. Nosotros, en cambio, llevamos cuatro años con posiciones en el valor y seguimos confiando en él. Aunque menos, todavía tiene margen», asevera.
Por eso, Magaz mantendrá el valor en cartera si no pierde el canal alcista y el soporte de los 105 euros. «Por fundamentales, nos parece caro pero es muy buena opción a largo plazo. Va a seguir incrementando su rentabilidad y lo que ahora es un precio caro estará barato en un tiempo».
En todo caso, para el inversor que tenga la mala suerte de haberse perdido este rally, los expertos recomiendan mantenerse fuera del valor o esperar a recortes para entrar.
«A partir de los 80-90 euros se puede empezar a verla otra vez, porque estaría a 20 veces beneficios y a 3-4 por ciento de generación de caja que, no siendo baratísimo, está justificado para una compañía de esta calidad y de este crecimiento», dice Galán.