Bancos centrales, el gran enemigo público de los inversores
Los bancos centrales casi nunca atinan con los tiempos y las necesidades reales que tienen la economía y los mercados
La idea de que los bancos centrales son el gran enemigo al que se enfrentan los inversores la volvió a respaldar el profesor de economía del IEB y gestor de fondos, Javier Santacruz, en el podcast de mercados de finanzas.com.
“Sí son un peligro público para los inversores”, afirmó tajantemente el experto. “Lo son siempre porque nunca atinan con los tiempos y las necesidades reales que tiene la economía respecto a la cantidad de dinero que tiene que circular”, recalcó.
La fuerte volatilidad que azotó al mercado nada más arrancar el año se debió en buena parte al mensaje agresivo de la Fed. Para complicar más las cosas, el BCE ofreció un mensaje similar hace unas semanas, pero provocó tal oleada de aversión al riesgo que tuvo que matizar sus planes de reducción de estímulos para calmar al mercado.
Lo cierto es que los tiempos que manejan los bancos centrales y la estrategia que suelen elegir para comunicarlos no son siempre las más acertadas. Pero la realidad solo tiene una cara y ésta pasa por el fin de las políticas monetarias laxas.
Las valoraciones tendrán que reducirse con los bancos centrales
“El mercado se está dando cuenta de que los Estados Unidos serán los primeros en poner fin a la etapa del dinero gratis”, aseguró Santacruz.
Esto implicará que las valoraciones tendrán que reducirse de una manera sustancial. “Ya lo hemos visto con las tecnológicas y con algunas cotizadas en España”, dijo el gestor.
Y es la tendencia que “veremos en los próximos meses conforme las expectativas se vayan adecuando a la certeza de que el dinero no es gratis y al hecho de que hace falta generar beneficios para que las subidas del mercado sean sanas”, apuntó Santacruz.
Respecto a la reciente subida de la prima de riesgo en España, el experto del IEB la enmarcó en un contexto de normalidad.
“Es una buena señal, la deuda vuelve a ser deuda y refleja que las cosas van a ir normalizándose poco a poco”, explicó en la entrevista conducida por el director de publicaciones del grupo Economía Digital, Ismael García-Villarejo.
El problema de la fragmentación de los mercados
Entre los errores imputables a los bancos centrales, Santacruz destacó la fragmentación de los mercados, una cuestión especialmente sensible que todavía sigue sin tener solución.
Este problema hace referencia a los diferentes costes de financiación que soportan los países de la zona euro. En lugar de solucionarlo, lo que hicieron los bancos centrales “es echar paladas de liquidez”, lamentó Santacruz.
Por eso mismo, la máquina de imprimir billetes hizo que en términos reales la posición acreedora de Alemania creciese de manera explosiva y la de España o Italia fuera cada vez más deudora.
Ahora hay dos extremos. “El conjunto de la zona euro debe a Alemania más de 1,2 billones de euros, mientras que España e Italia deben cada uno en torno a 400.000 millones”, dijo Santacruz para ilustrar los problemas que plantea la fragmentación financiera.
A vueltas con la volatilidad
Respecto a los fuertes episodios de volatilidad, de los cuales son en parte responsables los bancos centrales, Santacruz abogó por la rápida normalización de las políticas monetarias, algo que consideró especialmente “importante”.
Además, propuso retomar en Europa las reglas del pacto de estabilidad, de manera que los países cumplan otra vez sus objetivos de déficit y deuda.
“Esto implicará una vía de ajustes para las empresas, que tendrán que provisionar una parte de fondos por las subidas de impuestos”, explicó el experto.
Igualmente consideró necesario agilizar la regulación de los mercados digitales en Europa, aunque no vio factible que el proceso concluya antes de dos años ya que es un proceso “extraordinariamente complejo.
“Para que crezca la productividad hay que estabilizar este marco”, dijo Santacruz, en la medida en que introduce un elemento de disciplina para que todos los agentes sepan a qué atenerse y se puedan establecer nuevos negocios.