Con la mirada en las primeras citas con los bancos centrales
En la última semana hemos contado con mensajes muy diferentes procedentes de miembros del Banco Central Europeo. Por un lado,[…]
En la última semana hemos contado con mensajes muy diferentes procedentes de miembros del Banco Central Europeo. Por un lado, Ardo Hansson, que forma parte de su consejo de gobierno, afirmó que el Eurobanco podría acabar con su programa de compra de bonos en septiembre de un plumazo, sin una nueva prórroga, como espera parte del mercado. Pero, por otro lado, el vicepresidente del BCE, Vítor Constancio, aseguró que la política de la institución seguirá siendo gradual, para no ahogar el crecimiento y, además, se mostró preocupado por la apreciación del euro, que en su opinión no tiene fundamentales detrás, puesto que la inflación sigue baja en la zona euro.
Después de este cruce de declaraciones, la hora de la verdad llegará el próximo jueves, cuando la autoridad monetaria de la zona euro celebrará su primera reunión del año. Su presidente, Mario Draghi, podría dar pistas sobre sus futuras actuaciones, decantándose por la visión más agresiva o por la más acomodaticia.
Lo que diga será importante: el mercado en los primeros días del año había anticipado que quizás podría acelerar el proceso de normalización de la política monetaria, lo que había ayudado a que los tipos de los bonos subieran y a que las cotizaciones de la banca, tan importante en el Ibex-35, crecieran, en detrimento de los sectores más defensivos. Esas mismas expectativas han sido las que han hinchado al euro hasta su nivel más alto desde finales de 2014, convirtiéndose en un lastre para los índices alemán y francés, sobre todo.
Para la primera reunión de política monetaria de la Reserva Federal habrá que esperar aún una semana más. La situación allí está más clara: el balance se está reduciendo y la próxima subida del precio del dinero no se espera hasta el mes de marzo. Quizás la incógnita está en el número de veces que la Fed subirá los tipos este año en total si es que de verdad el crecimiento se acelera con las bajadas de impuestos.
Acciona encabeza las ganancias del Ibex-35. La antigua constructora y ahora especializada en energía y servicios encabezó las ganancias del Ibex-35 en la semana, lo que le sirve para instalarse cómodamente entre los diez valores más rentables de lo que llevamos de 2018, acompañada por bancos y compañías cíclicas, como ArcelorMittal. Ello, después de cerrar el ejercicio pasado con una ligera pérdida del 2,70%.
La empresa, desde principios del mes de diciembre, no deja de cosechar recomendaciones de compra. En la última semana, ha sido Isidoro del Álamo, de BBVA, el que ha emitido un consejo de sobreponderar, con un precio objetivo de 94 euros, frente a los 74 a los que cotiza en la actualidad. La semana previa fue Félix Brunotte, de AlphaValue, que elevaba su valoración hasta los 106 euros, la más alta entre todas las comunicadas recientemente. El precio objetivo medio que le da el consenso es de 81 euros, lo que le da un potencial nada despreciable de casi un 9%. Ningún analista recomienda vender.
Saeta se dispara ante la posibilidad de una oferta. La empresa especializada en energía renovable participada por ACS, con su subida del 10% en la semana, ha entrado en el listado de los diez valores más rentables del año. La empresa se ha disparado en los últimos días al confirmarse el interés que por ella tiene el fondo canadiense Brookfield. La compañía ha recibido tres recomendaciones tras trascender la noticia: BBVA y Santander optan por mantener, con precios objetivos de 11,10 y 10,90, respectivamente. Bankinter, por comprar, con objetivo en los 12,65 euros.
ASML saca pecho con sus buenos resultados. El fabricante de semiconductores holandés se ha disparado esta semana y ha ido directamente a colocarse en el primer puesto por rentabilidad en el Eurostoxx 50 este año. La tecnológica cotiza en máximos de más de un año. El empujón alcista se lo han dado sus resultados de 2017 que presentó el pasado día 17, que contaron con el impulso de un magnífico cuarto trimestre, en palabras de los expertos de Mirabaud. La mayor parte de las últimas recomendaciones han sido de compra.
¿Ampliación de capital en General Electric? El conglomerado industrial estadounidense fue el peor valor del Dow Jones el año pasado, pero comenzó este nuevo ejercicio con mucha fuerza. En las dos primeras semanas llegó a sumar un 7,5%. Pero en la que termina ha sufrido un importante descenso que le ha llevado a encabezar otra vez las caídas del índice americano. Quizás haya despertado los temores sobre el valor el diagnóstico de Deutsche Bank: la compañía podría verse obligada a ampliar capital para reforzarse.