¿Desafía Bankia al mercado?
En el equipo que dirige la salida a Bolsa de Bankia, hay alguien que vivió de cerca la mala experiencia[…]
En el equipo que dirige la salida a Bolsa de Bankia, hay alguien que vivió de cerca la mala experiencia de Banesto cuando en 1990 Mario Conde dejó pasar el verano para vender en Bolsa las acciones de su Corporación Industrial. Pese a la tardanza con la que Solchaga, ministro de Economía, concedió las exenciones fiscales, la operación pudo llevarse a cabo en el mes de junio o julio, pero una cierta inestabilidad en los mercados les hizo posponerla, con el visto bueno de su colocador, UBS, hasta septiembre. Gravísimo error. El 2 de agosto, la invasión de Kuwait por Sadam Hussein produjo una profunda y larga depresión de los mercados que obligó a suspender todas las salidas a Bolsa.
Agosto ha sido un mal consejero en los últimos años y en este ejercicio no es descartable alguna sorpresa. Bankia no puede permitirse que una quiebra de Grecia, por ejemplo, le impida captar dinero en los próximos 12 ó 24 meses. Ello sería, además de catastrófico para la propia entidad, para todo el sector bancario español e incluso para la credibilidad de nuestra economía porque supondría parar en seco nuestra reforma financiera.
Por ello, Bankia sale al mercado, aunque ello signifique colocar sus acciones a un precio inferior al deseado y atraer un volumen de fondos bastante más bajo del inicialmente previsto. Se ha asegurado para ello el apoyo de los pequeños inversores a través de su amplia red y de la participación de bancos, seguros y fondos españoles. El reto institucional europeo, que originalmente debería haber puesto precio a la operación, queda aparcado para tiempos menos volátiles.