El 'Brexit' provoca la mayor caída de la historia del Ibex-35

Al mercado le pilló completamente de improviso que el resultado del referéndum británico fuera el 'Brexit', debido a las subidas que había registrado en las últimas sesiones descontando el 'Bremain'. Por tanto, los índices de renta variable respondieron fuertemente a la baja. El desplome en las bolsas, no sólo por las consecuencias económicas que pueda tener el resultado del referéndum, sino sobre todo por los efectos políticos de segunda vuelta del 'Brexit', como el posible referéndum en Escocia, el de Irlanda del Norte para incorporarse a Irlanda, así como los llamamientos eurófobos de Marine Le Pen y otros líderes europeos. La Unión Europea está en cuestión y la incertidumbre institucional cotiza a la baja. Se abre un largo periodo de negociación entre la UE y el Reino Unido y puede haber sobresaltos y tiras y afloja. 

La caída fue sobre todo importante en los índices de la periferia, dado que el selectivo español terminó el día con una caída del 12,35%, la mayor caída de la historia, para dar un último cambio en los 7.787,7 puntos, a un paso de los mínimos anuales que marcó el 11 de febrero en los 7.746 puntos. Las pérdidas en el año vuelven a superar, pues, el 18%. Pero que el selectivo español sólo lo hizo el Ftse Mib de Milán, que perdió un 12,48%. El Cac 40 francés, por su parte, perdió un 8,04%. El PSI-20 de Lisboa, mientras, se dejó un 7%. El Dax alemán, mientras, bajó un 6,82%. El mejor del día, sorprendentemente, el Ftse 100 británico, que cerró con un descenso del 3,15%. 

El mayor castigo relativo sufrido por el Ibex-35 seguramente tuviera que ver con el desplome del sector financiero, el más castigado del día y que tiene un importantísimo peso en el selectivo. Tras la aerolínea IAG, fruto de la fusión, básicamente, de Iberia y British Airways, que se desplomó un 28,86%, se colocaron un buen puñado de bancos: Bankia perdió un 20,78%, Sabadell y el Santander se hundieron un 19,29% y un 19,89%, respectivamente, mientras que CaixaBank bajó un 18,13% y BBVA, un 16,18%. Popular, por su parte, se dejó un 15,29%. 

Entre los peores también se colocó Telefónica, que retrocedió un 16,12%, mientras que Merlin Properties se dejó casi un 15%, mientras que ArcelorMittal se dejó un 12,75%. Repsol, ACS, Mediaset e Iberdrola retrocedieron alrededor de un 10%. 

Después se colocaron Gas Natural y Ferrovial, con pérdidas de un 9,32% cada uno. Mapfre, Bankinter y Dia también bajaron más de un 9%. 

El mejor del día fue FCC, con un recorte del 0,45%. A partir de ahí, Viscofán, que se dejó un 2,04%, mientras que Técnicas Reunidas y Grifols se dejaron un 3,55% y un 3,78%, respectivamente. Después, Amadeus, que cedió casi un 5%, mientras que Acerinox bajó más de un 5% y Abertis, Red Eléctrica, Inditex y Acciona cayeron más de un 6%. 

Verdaderos desplomes en las acciones del Ibex-35. ¿Y en el Mercado Continuo? Sólo tres valores cerraron en verde: Naturhouse, San José y Cementos Portland. En rojo, ningún valor superó en pérdidas a IAG. A Bankia, sólo Liberbank, que perdió un 12,73%. 

En el Eurostoxx 50, el peor comportamiento lo firmaron los bancos italianos Unicrédito e Intesa SanPaolo, que perdieron alrededor de un 23%. Después se colocó Société Générale, con un retroceso del 20,57%. BNP Paribas, mientras, cayó un 17,40% e ING, alrededor de un 15%. Ninguno de sus valores terminó el día con ganancias. 

Los tipos de la deuda de la periferia, al alza

Mientras las Bolsas bajaban, los tipos de la deuda de la periferia subían con fuerza: el rendimiento de los bonos españoles a diez años subía hasta superar el 1,60%, con el interés del bono alemán entrando de nuevo y decididamente en negativo, acercándose al -0,10%. Con ello, la prima de riesgo terminaba la jornada en el entorno de los 170 puntos básicos, máximos desde mediados de 2014. El comportamiento era similar en Italia y algo peor en Portugal. Sin duda esta ampliación de diferenciales se encuentra detrás también del hecho de que las Bolsas de la periferia lo hicieran peor que las del centro de Europa. 

Bajaban las rentabilidades de los títulos alemanes y también las de los del Reino Unido, ante la previsión de reducciones de tipos de interés por parte del Banco de Inglaterra. También a la baja el interés de los bonos americanos: desde niveles que rondaban el 1,75%, hasta colocarse en el 1,56%. 

En el mercado de divisas, el gran ganador fue el dólar. En primer lugar, porque contra la libra registró una fuerte subida del 8,5%. Con este movimiento, la divisa británica marcó su nivel más bajo desde 1985. Además, el billete verde ganó posiciones respecto al euro: al cierre, avanzaba un 2,5%, hasta el nivel de 1,11 unidades. Pudo haber sido peor para la moneda única, puesto que marcó el mínimo del día en el entorno de 1,09%, con lo que hubiera firmado su peor sesión desde su nacimiento. La fortaleza del dólar, dicen los expertos, convierten a esta moneda en el mejor refugio frente a las posibles nuevas caídas de la renta variable, debido a que tiene margen al alza y a que los refugios de la renta fija cotizan ya a precios de burbuja. 

En el mercado de materias primas, el dinero salió de las cíclicas, como el crudo (el barril de Brent, de referencia en Europa, cedía un 4,44%), pero entró en las más defensivas, como el oro, que ganaba casi un 5% al cierre de la sesión europea, para marcar los 1.318 dólares la onza, su nivel más alto desde el año 2014.