«El bancario es un sector que no nos gusta, pero España es una excepción»
El gestor de la firma francesa destaca que tiene posiciones en Bankinter y augura crecimientos en la cartera de crédito global en el plazo de un año.
Mark Denham, gestor de renta variable europea de Carmignac, explica que las bolsas el pasado año con sus caídas anticiparon que las previsiones de beneficio para 2019 eran probablemente demasiado elevadas y considera que aún siguen siendo altas. Por ello, estima que en las dos o tres próximas semanas, a medida que las empresas vayan presentando sus cuentas de 2018, los números se irán ajustando. Así, considera difícil que las bolsas puedan hacer progresos a corto plazo.
¿A partir de ahí, cómo puede ser el año?, ¿las bolsas pueden rebotar?
Los mercados ya han registrado un rebote, tras haber llegado a niveles de sobreventa a finales de 2018. Ahora los inversores van a mirar los resultados con detalle y los analistas cerrarán sus previsiones para 2019. No podemos predecir qué puede pasar en los mercados en un plazo de un año, es demasiado difícil, pero creo que una vez atravesemos este periodo de ajuste no será un mal punto de entrada: las bolsas europeas cotizan con un per de 13 veces, por debajo de su media histórica; y su rentabilidad por dividendo está en el 4,2 por ciento, un nivel atractivo. Con estas cifras, es difícil defender que éste no es un buen punto de entrada, pero no puedo garantizar que la bolsa vaya a subir de forma inmediata. Además, tenemos varias incertidumbres políticas por delante: no sabemos cuál va a ser el resultado del Brexit; y probablemente los partidos populistas ganen apoyo en las elecciones europeas... Pero, con vistas a los próximos cinco años, éste sí es un buen punto de entrada.
En ese horizonte de cinco años, ¿incluye la posibilidad de una recesión?
Sí consideramos la desaceleración económica, pero no una recesión. El crecimiento económico en Europa es bastante bajo, de todas formas, inferior al americano o al asiático. Como inversor en Europa, estoy acostumbrado a ese escenario económico, por lo que trato de encontrar acciones que puedan crecer y sean menos dependientes del ciclo.
¿Cómo impactarán las elecciones europeas?
Estamos viendo un aumento de las fuerzas populistas y un crecimiento del sentimiento anti-europeo. Por ello, podríamos ver cómo aumentan las dificultades de la UE para imponer, por ejemplo, restricciones presupuestarias a los países. Y parece que los criterios iniciales para ser miembro de la UE están siendo ignorados. En términos de mercados, podríamos ver cómo algunos sectores, los más expuestos a la regulación o a los gobiernos, como utilities, infraestructuras o telecos, sufren más presión, quizás porque opten por no ser agresivos en el establecimiento de precios.
Hablando de crecimiento de los populismos, ¿cómo ve la bolsa italiana?
Durante un tiempo, tuvimos posiciones en Pirelli. Aunque su estrategia, enfocada a los neumáticos premium, ha funcionado, aún mantiene exposición a la gama más estándar, que se ha ido debilitando, y temo que esa debilidad pueda alcanzar a la premium en los próximos trimestres. Cuando invertimos, no lo hacemos por países. Nosotros hacemos una aproximación bottom-up, es decir, nuestro proceso de inversión se fija en negocios con alto y estable retorno del capital y que reinviertan sus beneficios. Ello, en Europa, nos deja fuera del sector bancario, del petrolero, de commodities y de utilities. Y el mercado italiano está lleno de bancos, tiene a Eni...
¿Qué opina sobre la bolsa española? Es bastante parecida a la italiana...
El mercado español tiene una composición muy similar, con concentración de bancos, utilities y Telefónica. Pero también cuenta con compañías de crecimiento muy interesantes, como Amadeus o Grifols, por ejemplo, nombres que hemos tenido en el pasado. Además, a pesar de que el bancario es un sector al que estamos poco expuestos, la única posición que tenemos es en España, a través de Bankinter, un banco cuya cuota de mercado está creciendo, con su foco en particulares y pequeñas empresas, y que no tiene herencias negativas de la crisis inmobiliaria, por lo que está en buena posición para que su balance y su cuota de mercado en créditos crezcan. La economía española ha sido una de las más fuertes en Europa y ello es un buen escenario para la recuperación del sector. Aunque la concesión de crédito crece, su volumen total sigue bajando porque la economía se sigue desapalancando; pero llegará un momento, quizás en un año, en que el crédito crezca. Es un sector que no nos gusta, pero España es una excepción.
¿Está preocupado por la desaceleración de la economía alemana?
La economía alemana es muy sensible a los fenómenos externos, porque es muy exportadora. A ello hay que unir su exposición a sectores como autos, ingeniería... de nuevo sectores a los que no tenemos mucha exposición. Lo que ocurre en Alemania es un reflejo de la desaceleración global. Y sería beneficioso para todos que EE.UU. y China llegaran a un acuerdo comercial. Pero aún tenemos que esperar y ver. Pese a todo, en Europa podemos encontrar buenas ideas de inversión. En Alemania estamos sobreponderados, pero tenemos sobre todo software, con SAP; y participamos en la salida a bolsa de Knorr-Bremse. Encontramos oportunidades, pero no en los sectores más sensibles a la desaceleración global.
¿Y por qué sectores se inclina?
Las dos áreas en las que tenemos una mayor concentración es en el sector salud y en el tecnológico. En el primero, tanto en las grandes farmas, como en medtech y en las biotech. Entre las grandes farmas, apostamos por Novo-Nordisk y por Sanofi. Y un tema que nos gusta mucho es el de las biotecnológicas medianas, como Galapagos, que son innovadoras y dinámicas, y que podrían ser lo que necesitan las grandes farmas, que no están siendo muy productivas en los últimos años. En cuanto a la tecnología, el software en particular nos encanta. Nuestra favorita es SAP. También nos gustan compañías que son capaces de generar beneficios y que los reinvierten en seguir creciendo, como Assa Abloy. En el sector financiero, estamos invertidos en London Stock Exchange. Y nos gustan las renovables, sobre todo las eólicas, con nombres como Vestas y Orsted.
¿Tiene más exposición a Reino Unido?
La mayor parte de la exposición al Reino Unido tiende a ser a través de compañías multinacionales que operan internacionalmente, como Reckitt Benckiser. Tenemos muy poca exposición a compañías domésticas, únicamente a Asos, la distribuidora online. La libra esterlina ha estado fuerte en la última semana, porque el mercado piensa que la probabilidad de un Brexit duro se ha reducido o ha desaparecido. Pero creo que la situación es muy cambiante en Westminster. Además, los mercados no predijeron el resultado del referéndum de 2016, por lo que no daría mucha probabilidad a que ahora estén en lo cierto. Todo cambia de un día para otro, por lo que sería muy cuidadoso.
¿Está preocupado por el conflicto social francés?
Sí. No tenemos mucha exposición a la Francia doméstica: sólo a Vinci.