El BCE baja los tipos en 25 puntos básicos hasta el 3,5%
El BCE recorta el precio del dinero pese a considerar que los precios subirán en la parte final del año e incrementar las previsiones de inflación subyacente para 2024 y 2025
El Banco Central Europeo ha cumplido con las previsiones del mercado y ha bajado los tipos de interés en un cuarto de punto hasta situar la facilidad de depósito en el 3,5 por ciento, según ha informado la institución este jueves a través de un comunicado.
Se trata de la segunda bajada que el organismo realiza este año, después de la que efectuó en junio, también de 25 puntos básicos, y que inició el ciclo de flexibilización tras dos años de políticas restrictivas para poner freno a la inflación. De este modo, el BCE da un paso más hacia la normalización gradual de la política monetaria, en un entorno de ralentización del crecimiento de la eurozona.
"Resulta apropiado ahora dar un paso más en la moderación del grado de restricción de la política monetaria", dice el documento publicado por el BCE.
La institución ha adoptado esta decisión de manera "unánime" pese a reconocer que los precios subirán en la parte final del año e incrementar sus previsiones de inflación subyacente para 2024 y 2025, entre otros factores debido a la presión de los salarios.
Específicamente, su pronóstico de inflación subyacente para 2024 sube una décima hasta el 2,9 por ciento; mientras que la de 2025 se incrementa otra décima hasta el 2,3 por ciento.
Aun así, el organismo justifica su decisión de bajar los tipos en las perspectivas del equipo de economistas del BCE, que espera "una rápida bajada de la inflación subyacente" hasta el 2 por ciento en 2026.
Asimismo, otro factor que le ha permitido adoptar esta decisión de flexibilización monetaria es que la inflación general se comporta de acuerdo "con lo esperado".
"Los datos de inflación recientes han sido, en conjunto, acordes con lo esperado, y las últimas proyecciones de los expertos del BCE confirman las perspectivas de inflación anteriores", dice el comunicado.
Específicamente, los expertos del BCE prevén que la inflación general se situará, en promedio, en el 2,5 por ciento en 2024, el 2,2 por ciento en 2025 y el 1,9 por ciento en 2026, sin variación respecto a las proyecciones de junio.
Sin pistas respecto a los próximos pasos del BCE
Dado que el recorte de tipos estaba descontado por el mercado, la atención de los inversores se ha focalizado en los próximos pasos del BCE.
A ese respecto, el comunicado ofrece pocas pistas y se limita a repetir fórmulas como que "el BCE mantendrá los tipos en niveles lo suficientemente restrictivos" durante el tiempo que sea necesario para devolver la inflación a sus niveles objetivo, sobre el dos por ciento.
Tampoco la presidenta de la institución, Christine Lagarde, ha accedido a ofrecer muchas más pistas en ese sentido en la rueda de prensa que ha ofrecido tras la reunión del consejo de gobierno. "Qué será, será", ha dicho con sorna, en español. De hecho, ha insistido varias veces en que las decisiones se tomarán, reunión por reunión, en función de la evolución de los datos.
De este modo, el BCE ha evitado comprometerse a una senda prestablecida de recortes de los tipos de interés.
El BCE rebaja sus previsiones de crecimiento
Más allá de la inflación y los tipos, el BCE también ha ofrecido su visión sobre la evolución de la economía europea, otro aspecto de gran interés para los inversores, preocupados por la ralentización del crecimiento.
A ese respecto, la institución también ha rebajado ligeramente sus expectativas de crecimiento del bloque del euro.
En concreto, ha recortado en una décima su previsión para 2024, 2025 y 2026; al 0,8 por ciento, el 1,3 por ciento y el 1,5 por ciento, respectivamente, "debido fundamentalmente a una menor contribución de la demanda interna en los próximos trimestres".
A ese respecto, Lagarde ha reconocido debilidades en la economía europea, pero ha aseverado que se fortalecerá en los próximos trimestres.