El BCE desconfía del bitcoin
Con la hoja de ruta de la reducción progresiva de estímulos ya requetecomunicada y todavía sin un gobierno en Berlín[…]
Con la hoja de ruta de la reducción progresiva de estímulos ya requetecomunicada y todavía sin un gobierno en Berlín como nueva referencia europea, el contexto en el que se celebra la reunión del Consejo del BCE, este jueves, aparece marcado por realidades tan 4.0 como la fuga de capital rumbo al bitcoin. El gobernador del Banco Nacional Austríaco y miembro del Consejo del BCE, Ewald Nowotny, ha recomendado a los inversores no sobreestimar la critpmoneda que escapa, de momento, a la regulación.
A juicio del BCE, su entrada en el mercado de futuros «no dice nada sobre su valor intrínseco». «También hay contratos futuros de mitades de panza de cerdo», ha ironizado Nowotny esta semana en Viena, advirtiendo que el bitcoin es un producto «para especuladores, pero no es una moneda».
Nowotny no es el único miembro del Consejo del BCE que desearía abordar una regulación del bitcoin. En un contexto en el que los bancos centrales han estado inyectando ingentes cantidades de dinero en los mercados, es evidente que una parte de esa expansión ha escapado al ámbito económico que pretendían estimular por la puerta digital, inflando el bitcoin hasta los 18.000 dólares la unidad, un valor que eleva su cotización al nivel de empresas como McDonalds.
Y no ha hecho más que empezar. Los expertos del BCE consideran que la dimensión actual de la criptomoneda es todavía relativamente pequeña, a nivel mundial sumaría una cantidad equivalente a unos 141.000 millones de euros, frente a los 1.100.000 millones de euros que hay en circulación. Pero para regular este tipo de producto sería necesario antes responder un par de preguntas, como por ejemplo a quién corresponde regularlas y, sobre todo, cómo regular una realidad virtual y apátrida como es el bitcoin, algo que puede parecerse mucho a querer poner puertas al campo.
En opinión de Nowotny, competiría a la Comisión Europea proponer una reglamentación. Supondría un desafío a nivel jurídico, porque puede usarse para blanquear dinero o para transacciones ilegales, por lo que habría que aplicar la normativa de la UE sobre lavado de dinero. Y mientras eso suceda, los bancos deberán acelerar la introducción de los pagos instantáneos para contrarrestar el atractivo de las divisas digitales, taly como ha recomendado otro miembro del Consejo del BCE, Yves Mersch.
«En mi opinión, las innovaciones futuras en los pagos minoristas se basarán en los pagos instantáneos en combinación con el acceso a la cuenta proporcionado por el PSD2. Me gustaría subrayar este punto, especialmente en vista del debate público actual sobre la supuesta innovación aportada por los esquemas de monedas virtuales privadas o los tokens», ha dicho, tratando por otra parte de tranquilizar sobre el potencial del bitcoin al considerar que «aunque hemos visto un aumento sustancial, partiendo de niveles bajos, en el valor de algunas de las monedas virtuales últimamente, no debemos olvidar que su uso como activo de liquidación es marginal y la aceptación general del usuario como medio de pago es insignificante».