El Ibex-35 se apoya en EE.UU. y China y cierra al alza en una sesión clave para el Brexit
Los índices europeos cerraron al alza, con el apoyo de Wall Street y de los posibles estímulos que puede poner en marcha China. Pero reinó la cautela por la incertidumbre que rodea a la votación que tendrá lugar en Londres a última hora de la tarde.
Jornada de ida y vuelta en el Ibex-35. El selectivo español arrancaba la jornada en positivo y por encima de los 8.900 puntos, pero poco a poco fue perdiendo posiciones, para entrar en números rojos a las doce de la mañana. A partir de las tres de la tarde empezó a recuperar terreno, para lograr terminar el día con ganancias de un 0,36% y en los 8.850,1 puntos. Lejos de máximos del día, en todo caso.
El mejor de todos los índices europeos fue el PSI-20 de Lisboa, que ganó un 1,05%. El Ftse 100 británico, por su parte, se anotó un 0,58%. Mientras, el Cac 40 francés avanzó medio punto porcentual. Y el Dax alemán, un 0,33%. La excepción en rojo fue el Ftse Mib de Milán, que cerró con un descenso mínimo del 0,03%.
Dentro del Ibex-35, en verde, Ence encabezó las ganancias, con una subida del 6,79%, seguido de Amadeus, que se anotó casi un 3,5%.
En rojo terminaron una docena de valores encabezados por Mediaset, que retrocedió un 2,77%, seguido de IAG, Siemens Gamesa, Cellnex y ACS, todos con pérdidas de más de un punto porcentual. Entre los grandes, descensos para Telefónica, que bajó un 0,42%, y para Repsol, que se dejó un 0,20%.
China y Netflix, impulsos para Wall Street
Las razones por las que la Bolsa española comenzó la sesión al alza y después también la americana pasan por China, por la expectativa de que su Gobierno ponga en marcha medidas de estímulo, en particular, rebajas de impuestos a gran escala, después de los malos datos macro publicados en los últimos días. Los economistas de JP Morgan, según recoge Bloomberg, estiman un impacto total de 2.000 billones de yuanes o 300.000 millones de dólares, es decir, cantidades equivalentes al 1,2% del PIB chino.
Con ello, ya vimos que por la mañana el índice Nikkei de Tokio subió casi un punto porcentual y los indicadores chinos, el Hang Seng de Hong Kong y el CSI 300, alrededor de un 2%.
En Wall Street, el índice que más partido le sacaba a los rumores que venían de China era el tecnológico Nasdaq que, al cierre de la sesión europea, se anotaba alrededor de un 1,20%. El S&P 500, mientras, subía un 0,80%, y el Dow Jones, alrededor de un 0,35%.
El Nasdaq también subía con fuerza después de que Netflix anunciara una subida de precios por primera vez desde 2017 con el argumento de que necesitan seguir invirtiendo en contenidos propios. Con las compras de acciones de la plataforma audiovisual (subía más de un 6%) los inversores muestran su confianza en que los clientes continúen fieles a ella pese a encarecerse.
En el capítulo de los resultados, los de UnitedHealth fueron muy bien acogidos en Wall Street: encabezaba las subidas del Dow Jones con ganancias de un 2,75%, mientras que no ocurrió lo mismo con JP Morgan, que bajaba un 0,30%, o con Wells Fargo, que retrocedía alrededor de un 2%.
Una sesión clave para el Brexit
Los mercados, además de pendientes de China y de Estados Unidos, prestaban una especial atención a lo que acontecía en el Parlamento de Londres. A última hora de la tarde de hoy se espera que se vote el acuerdo al que llegaron el Gobierno británico y la Unión Europea y todo apunta que el Ejecutivo de Theresa May podría sufrir una derrota histórica (el precedente que se tiene como referencia es la pérdida por 166 votos que sufrió Ramsay MacDonald en 1924).
Los analistas explican que si bien la derrota de May es un resultado esperado, la reacción de los mercados mañana dependerá del margen por el que los parlamentarios rechazarán el acuerdo sobre el Brexit: cuanto menor sea (cuantos menos diputados voten contra el acuerdo), mayores posibilidades hay de que pueda aprobarse en una segunda votación que tendría lugar el día 21 de enero; y también, mayor probabilidad existiría de que se retrase la fecha oficial de salida de la UE y, por tanto, mayor puede ser el margen de renegociación bilateral. Pero si la derrota se produce por una diferencia muy amplia Bruselas y el mercado entenderán que el acuerdo no es muy factible. Por tanto, ahora mismo, todos los escenarios siguen abiertos: desde un Brexit sin acuerdo hasta unas nuevas elecciones tras una moción de censura que presenten los laboristas de Jeremy Corbyn e incluso un nuevo referéndum que pueda abortar todo el proceso que ya dura dos años y medio.
La libra esterlina espera la votación sufriendo la mayor caída de entre las divisas del G-10 contra el dólar: retrocede alrededor de un 0,80%. Contra el euro la moneda británica baja un 0,17%.
El euro también pierde posiciones contra el billete verde: se deja un 0,6% y el tipo de cambio cae levemente por debajo del nivel de 1,14 unidades.
En el mercado de deuda, la rentabilidad del bono británico retrocede desde el 1,30% hasta el 1,25%. El resto de rendimientos de los bonos también se mueve a la baja en el Viejo Continente: el rendimiento de los títulos alemanes baja desde el 0,22% hasta el 0,20%. La sola excepción la constituye la deuda italiana: su interés sube del 2,84% hasta el 2,86%.
En Estados Unidos, el rendimiento de los bonos americanos se mantiene estable en el 2,70%.