El Ibex-35 se sobrepone al movimiento del Banco de Japón y recupera los 10.400
El Banco de Japón reducirá las compras de bonos a largo plazo y ello provocó un repunte de los intereses de los bonos, sobre todo de los americanos, que superaron el 2,5% por primera vez desde marzo del año pasado. Este fenómeno, a su vez, metió algo de nerviosismo en los mercados de renta variable. Pero éstos fueron capaces de terminar al alza, lo que le hizo posible al Ibex-35 la recuperación de los 10.400 puntos que había perdido ayer.
El Ibex-35 arrancó la sesión con ganas de subir y tras un movimiento 'in crescendo' marcó máximos del día en los 10.460 puntos pasada la una de la tarde. A partir de ahí, sin embargo, comenzó un declive que se acentuó a partir de las tres y media, con la apertura de la Bolsa de Nueva York, y que le llevó a perder los 10.400 puntos y a entrar en números rojos durante unos instantes. Desde ahí rebotó y cerró la sesión en los 10.426 puntos, lo que supone una revalorización del 0,27%.
Los más rentables del día fueron el Ftse Mib de Milán y el Cac 40 francés, que se anotaron alrededor de un 0,7%. Mientras, el Ftse 100 británico se apuntó un 0,45%. El Dax alemán lo hizo peor, dado que apenas logró anotarse un 0,13%.
Los índices de Wall Street comenzaron la jornada con dudas, pero al cierre de los mercados europeos, la plaza neoyorkina se encontraba en positivo, con el Dow Jones avanzando casi un 0,4%, mientras que el S&P 500 y el Nasdaq avanzaban alrededor de un 0,20%.
Las dudas presentes en la Bolsa de Nueva York obedecían al repunte de los intereses de los bonos: el interés del diez años estadounidense avanzaba desde el 2,48% hasta el 2,53%, su nivel más alto desde mediados del mes de marzo.
Ese repunte de la rentabilidad del bono americano se veía acompañado por un nuevo fortalecimiento del dólar frente al euro: la divisa comunitaria cedía alrededor de un 0,4% frente al billete verde, con lo que el tipo de cambio se situaba al cierre de la sesión en el entorno de 1,1925 unidades. La divisa estadounidense, además, avanzaba un 0,2% frente al conjunto de las principales monedas del mundo.
El mercado atribuía estos movimientos en los activos estadounidenses a la reducción de compras de bonos a largo plazo por parte del Banco de Japón, acontecimiento que llegó por sorpresa y que recuerda a los inversores que las autoridades monetarias a nivel global están cambiando su sesgo de ultra-expansivas a neutras e incluso restrictivas. Además, está calando que el retorno de la inflación puede ser el gran tema de este año. En todo caso, ambas son buenas noticias: indican que la recuperación se está instalando.
Además, el Banco de China realizó ajustes en el mecanismo de cambio del yuan.
Las subidas de las rentabilidades de los bonos americanos se trasladaron también a Europa. El interés de los títulos alemanes a diez años avanzaba desde el 0,43% hasta el 0,46%, mientras el rendimiento de los bonos españoles a diez años subía desde el 1,46% hasta el 1,49%.
La banca y los cíclicos, ganadores de la sesión
En este entorno, el sector financiero lo hizo muy bien. Y Sabadell y CaixaBank fueron los valores más rentables, con ganancias de un 2,14% y de un 1,74%, respectivamente. Mapfre, por su parte, se anotó un 1,68%.
A continuación, compañías cíclicas, como ArcelorMittal y Técnicas Reunidas, que avanzaron alrededor de un 1,65%.
Más de un punto porcentual sumaron Grifols y Amadeus también.
En rojo, Dia fue el peor, con un recorte del 2,59%. Después se colocaron Acciona, Red Eléctrica, Iberdrola y Gas Natural, con pérdidas de más de un punto porcentual. Las 'utilities' no son las empresas que más disfrutan cuando suben los tipos de interés de los bonos.
Pero muy pocos valores más terminaron en negativo: Indra, Acerinox, Siemens Gamesa, Mediaset, Ferrovial y Enagás.
En el Eurostoxx 50 pasó algo parecido, con entidades financieras como BNP Paribas, Intesa SanPaolo y Allianz entre los mejores, y con E.On encabezando los descensos.
El crudo continúa al alza
En el mercado de materias primas, el barril de Brent, de referencia en Europa, avanzaba un 1,11% al cierre, hasta los 68,53 dólares, un nuevo máximo desde diciembre de 2014. El de West Texas, de referencia en Estados Unidos, se anotaba un 0,57% y recuperaba los 62 dólares, marcando máximos también desde finales de 2014.
El precio del oro, sin embargo, retrocedía un 0,72%, hasta los 1.310 dólares.