El Ibex-35 toca los 9.400 y se repliega por mal de altura, Wall Street y el FMI

Europa cerró en positivo, pese a la debilidad de Wall Street, que sufría por la caída de Walgreens, a las incertidumbres del Brexit y a las advertencias económicas de Christine Lagarde.

Sesión de ida y vuelta en el mercado español. El Ibex-35 mostró dudas en la primera parte de la jornada para, a partir de su ecuador, optar decididamente por los números verdes. Llegó a marcar los 9.400 puntos a las cuatro de la tarde. Pero, desde ahí, volvió a venirse abajo. Al cierre, el índice daba un último cambio en los 9.363,5 puntos, lo que supone un ascenso del 0,23%. 

La mayor parte de los indicadores europeos aguantaron en positivo, pese a la incertidumbre derivada del Brexit y pese a las caídas que sufría Wall Street. La Bolsa de Nueva York, al cierre de los mercados del Viejo Continente, estaba muy débil: el Dow Jones bajaba alrededor de un 0,35%, afectado por malas perspectivas de Walgreens -se hundía un 12,25%-, que se llevaba por delante a las compañías de bienes de consumo, que se unían a las pérdidas de las energéticas. Mientras, el S&P 500 perdía un 0,20%, y el Nasdaq se encontraba plano. Las Bolsas también tenían que hacer frente al aviso de la directora gerente del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde, de que la semana que viene presentará unas perspectivas económicas peores de lo que se esperaba para el mundo, aunque descarta una recesión. Lagarde ha afirmado: "Hace sólo dos años, el 75% de la economía mundial experimentó un repunte. Este año, prevemos que el 70% de la economía mundial experimente una desaceleración". 

La incertidumbre sobre el Brexit (el Parlamento británico fracasó en su intento de lograr un consenso sobre este proceso) como viene siendo habitual, cotizó a la baja en la libra esterlina (retrocedía otro 0,3% frente al euro y un 0,5% respecto al dólar) y al alza en la Bolsa de Londres: el Ftse 100 británico terminó el día con una revalorización de un punto porcentual, convirtiéndose en el mejor del día. 

Mientras, el Dax alemán se apuntó un 0,62%. El PSI-20 de Lisboa ganó un 0,54%. El Cac 40 francés, por su parte, se anotó un 0,33%. El Ftse Mib de Milán, el peor de la jornada, terminó prácticamente plano. 

En su conjunto, el Eurostoxx 600 Europe alcanzaba su nivel más alto desde el pasado mes de septiembre. 

Técnicas Reunidas, el mejor; la banca doméstica, el lastre

En el selectivo español, Técnicas Reunidas fue el valor más rentable de todos, con una revalorización del 2,66%. Le siguió Acciona, también con una ganancia superior al 2%. Cellnex, Grifols y ArcelorMittal fueron los valores que se anotaron más de un punto porcentual. 

En rojo, el sector financiero, en concreto el más doméstico, porque tanto BBVA (0,41%) como el Santander (0,14%) cerraron al alza, jugó contra el Ibex. CaixaBank fue el valor que más bajó, con un recorte del 1,85%. A continuación se colocó Bankia, que se dejó un 1,55%. Sabadell, por su parte, cedió un 0,82% y Bankinter, un 0,54%. 

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En el Índice General de la Bolsa de Madrid, Pharma Mar fue el valor más rentable, con una subida del 3%. En rojo, Coemac y Service Point fueron los peores, con pérdidas de más de un 4%. 

Bonos, divisas y materias primas

En el mercado de bonos, las rentabilidades volvieron a caer. El interés de los títulos americanos a diez años retrocedía desde el 2,50% hasta el 2,47%. Mientras, el de su comparable alemán bajaba desde el -0,03% hasta el--0,05%. La rentabilidad del bono español a diez años volvía a niveles del 1,10%. 

En el mercado de divisas, el euro, al cierre de la sesión, caía alrededor de un 0,24%, hasta el nivel de 1,1187 unidades, su nivel más bajo desde finales de junio de 2017.

En el mercado de materias primas, el barril de Brent encadenaba su tercera sesión seguida de ascensos: se anotaba un 0,46%, hasta rozar los 70 dólares, nivel que no rebasa desde el 12 de noviembre. El barril de West Texas, de referencia en Estados Unidos, subía un 1,10% al cierre de las Bolsas europeas, para colocarse en los 62,26 dólares, máximos también desde el pasado noviembre. Ello, ante el recorte de oferta de la OPEP y ante la previsión de que los inventarios de crudo probablemente podrían haberse reducido en 900.000 barriles la semana pasada. 

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