Los datos de empleo medirán el impacto de las alzas de tipos
Esta semana los mercados mirarán con lupa los datos de empleo, especialmente en EEUU, para confirmar si la economía avanza a pesar de las agresivas subidas de tipos
Transcripción del podcast
La lectura que los mercados hagan de los datos de empleo estadounidenses, que se publicarán el viernes 7 de octubre, apuntan a que en todos los casos será negativa.
Y es que si las cifras son favorables, la interpretación de las bolsas será que la economía sigue funcionando con solidez a pesar de las fuertes subidas de tipos de los bancos centrales y eso implica que no hay argumentos para que rebajen su agresividad en las próximas reuniones.
Y en caso de que el crecimiento de empleo esté por debajo de lo esperado se verá como una señal de que la economía está más cerca de la recesión por culpa de esta política monetaria.
No hay motivos para el optimismo en ninguno de los dos casos.
Previsión de 250.000 empleos en septiembre
Los analistas calculan que la economía estadounidense creó 250.000 empleos en septiembre, frente a los 315.000 puestos de trabajo de agosto. La tasa de desempleo se mantendrá en el 3,7 por ciento.
En España se publicarán los datos el martes 4 de octubre. Los últimos conocidos, los de agosto, reflejaron un incremento del paro de 40.000 personas. Era el segundo mes consecutivo con malas cifras.
Otra cita destacada de la semana es el comienzo de la temporada de resultados del tercer trimestre. Aunque tardarán unos días más en presentar sus cuentas las grandes compañías, no parece que vayan a ser un apoyo para las bolsas, porque se espera que los beneficios estén por debajo de lo previsto.
Tormenta financiera en el Reino Unido
La atención también estará en el Reino Unido, epicentro de la última tormenta financiera, tras la intervención del Banco de Inglaterra para evitar el colapso del mercado de bonos. El plan fiscal del nuevo gobierno sigue asustando a los activos financieros.
Las dudas ahora se trasladan al corto espacio de tiempo que el banco central británico ha decidido comprar bonos, hasta el 14 de octubre, ya que en el mercado no tiene claro sobre si tan pocos días serán suficientes para devolver la calma y que los inversores recuperen la confianza.